Cinecittá busca salvarse a través del turismo

Fueron los favoritos de Fellini. En sus inmediaciones se han filmado más de 3.000 películas. Durante años fue el sitio predilecto para albergar las mayores producciones de Hollywood. Se trata de los míticos estudios cinematográficos Cinecittá, hoy convertidos en un parque temático, en la tradición de Disney o Universal Studios.

Actualmente, la ‘Ciudad del Cine’ experimenta una franca decadencia. Su presupuesto tuvo una caída de  15 y 30% entre 2012 y 2013. De las 60 películas anuales que se producían en sus inicios, hoy solo se realizan doce. Y más del 60% de sus ingresos no corresponde al cine, sino a las series de televisión que alquilan el espacio.

Cinecittá fue creada en 1937, en pleno fascismo italiano. Benito Mussolini veía al cine como una potencial arma propagandística y hasta 1945 se utilizaron los estudios para realizar películas profascistas y comedias livianas para entretener al gran público.

Su edad de oro llegó tras el fin de la Segunda Guerra Mundial, cuando el poderoso studio system de Hollywood vio en Cinecittá la oportunidad de abaratar costos para la filmación de sus grandes producciones, desde Ben-Hur (1959) hasta Pandillas de Nueva York (2002).

El fin de una era

En los años noventa, los estudios italianos pasaron a manos privadas. El Italian Entertainment Group (IEG) ha invertido unos 250 millones de euros en la creación de Roma Cinecittá World, un parque de diversiones que espera atraer un millón y medio de visitas en 2015.

Son 25 hectáreas diseñadas por el famosísimo escenógrafo Dante Ferreti (ganador del Óscar en 3 oportunidades) con réplicas exactas de las mega producciones de Cinecittá, en las que los visitantes podrán revivir sus películas favoritas.

La entrada general cuesta 29 euros, mientras que los niños pagan 23. Hay, además, bares temáticos, teatros y tiendas de souvenirs.

IEG apela a este último recurso para salvar a los estudios de su caída definitiva.