Casas patrimoniales de Guayaquil serán parte del Hotel del Parque

El Parque Histórico de Guayaquil, a través de la Empresa Pública de Parques, restaura y reconstruye la Casa Rosada, Casa Castagneto y de la Sociedad de Artesanos Amantes del Progreso. El proyecto fue anunciado en años anteriores, pero la semana pasada el presidente de la República, Rafael Correa; y  el gerente de la Empresa Pública de Parques Urbanos y Espacios Públicos, Geovanny Roditti, anunciaron la puesta en marcha.

Estos  bienes inmuebles patrimoniales, al igual que los otros cuatro que se encuentran en el recinto del parque, han permanecido desmontados y guardados desde la década del 80, que inició el proyecto de rescate arquitectónico, impulsado a través del Banco Central.

Este proceso de rescate arquitectónico del Banco Central inició con una suerte de inventario básico sobre el patrimonio de Guayaquil,  junto con estudios de universidades como la Católica, por lo que muchas de las casas que se desmontaron y que hoy se conservan no habían sido declaradas bienes inmuebles patrimoniales, sin embargo tenían un valor histórico y social para la ciudad. Esta era una de las condiciones para que sean parte del proyecto, explica el arquitecto Pablo Lee, quien integró la primera etapa de rescate.

La activación del programa se produjo a partir del deterioro de varias casas en peligro. Por ejemplo, lo que fue el Hospicio del Corazón de Jesús, ubicado anteriormente al final de lo que hoy es la calle Julián Coronel, conocida popularmente como la Calle de las Lágrimas, era derrocado. Lo mismo sucedía con la Casa Julián Coronel, pues había el proyecto de construcción de lo que fue el Banco del Progreso.

“En ese entonces había más conciencia del valor del terreno, que del valor histórico, social y cultural de las viviendas”, indicó Lee. Estas pronto serían reemplazadas por nuevas edificaciones.  

Otras de las condiciones para que estas viviendas, ahora declaradas patrimonio, integraran el proyecto era que haya un lugar donde puedan ser trasladadas, según también lo establece la Convención para la Protección de los Bienes Culturales de la Unesco. Además, el Museo Banco Central puso en vigencia el programa con el que pedían la donación de los edificios.  

Las viviendas que la Empresa de Parques Públicos rehabilitará y armará nuevamente en el Parque Histórico, tendrán nuevos usos. La Casa Rosada tiene proyectado implementar en la planta baja tres locales comerciales  y  dos hall en ambos pisos. Además tendrá un salón de eventos con capacidad para 300 personas.

Esta edificación, que actualmente tiene una réplica en la ciudad, estuvo integrada, debido a su uso residencial, por pequeños departamentos: cinco en la planta baja, más dos espacios para bodega y garaje. En la planta alta había cuatro departamentos, con las salas y un dormitorio orientados hacia la fachada.

La Casa Castagneto dispone de gran parte de su infraestructura original. Para su intervención y readecuación se habilitarán un ascensor y cuatro oficinas de negocios.

Por su parte, la Sociedad de Artesanos Amantes del Progreso dispondrá de una cafetería en la parte baja. Estas edificaciones se integrarán en su infraestructura con el proyecto Hotel del Parque, que se inaugurará en el espacio.

Según constata Miguel Yturralde, director regional 5 del Instituto Nacional de Patrimonio (INPC), las readecuaciones han sido previamente estudiadas y asesoradas por el instituto.

En el recinto arquitectónico se recrea la ciudad de Guayaquil del siglo XIX y comienzos del XX. (I)