Llega la hora de bailar en Danzarín. Sus habitantes y otras decenas de curiosos se dan cita para la elección de “La burra mejor vestida”. Se trata de un certamen de belleza que, por cuarto año consecutivo, se realiza en esta comunidad de casi 300 personas, en el cantón Rocafuerte, provincia de Manabí.

Para unos es un acto aberrante y hasta lo catalogan de maltrato animal, pero para otros es una forma de agradecer el trabajo de tan noble animal, que en estos días ha sido reemplazado por las motocicletas.

Son las 21:30 y los asistentes están impacientes. Los reflectores iluminan la única cancha encementada del sitio conocido por su fama de danzantes. Suena la Sonora Dinamita y con ello los caballeros invitan a sus parejas a bailar. Ellas encargan a sus vecinas las sillas que a $ 2 alquilaron mientras el animador del discomóvil se desgarra la garganta. El fresco de la noche obliga a los adultos a calentar las entrañas con un canelazo cargado de aguardiente de caña.

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— El Telégrafo Ecuador (@el_telegrafo) 16 de octubre de 2018

La elección se pone en peligro, la animadora Johana Zambrano, clama por ayuda: una burra se ha perdido. A los pocos minutos desde el público gritan: “acá está, no se fue con marido”. Las risas invaden el lugar y se anuncia a la primera participante: Georgina Anacleta, acompañada de su respectivo caballero. La descripción del animal, embellecido por los “misólogos”, levanta a los paparazzis en la pasarela.

El atractivo de Anacleta está en el brillo de sus pezuñas, bañadas con escarchas, y en sus perfilados labios, perfectamente pintados con labial rojo pasión. Los caballeros silban en señal de aprobación, mientras que las mujeres aplauden y los tres jueces examinan silueta, orejas, muslos y abdomen.

Johana anuncia que la ganadora se llevará un tratamiento en uno de los spa más exclusivos y cotizados de la provincia.

El caminar lento de “Paulina Rubio”, otra candidata, emociona a un anciano que entrado en tragos recita: el primer amor suele ser clandestino con besos escondidos pero jamás olvidados. La “rubia dorada” muestra sus delicadezas corporales adornadas de finos ropajes.

Ella da paso a la “India María”, quien destaca por sus gafas rosadas. Continúa el derroche de belleza con “Matilde”, “Claudia” y “Rubí de los Altares”, quien vestida de novia busca al manaba de sus sueños.

El jurado anuncia que “Claudia” ha ganado y que en 2019 la orquesta Diamantes amenizará la llegada de otras representantes al primer festival intercantonal de la “Burra mejor vestida”. (I)