Los técnicos de Ecuador y EE.UU. se enfrentaron el 17 de junio de 1994 durante el Mundial de Fútbol que se jugó en territorio norteamericano. Ese día Gustavo Quinteros defendió a la selección de Bolivia, mientras que Jürgen Klinsmann lideró la delantera de Alemania.  

El encuentro, que se dio en el estadio Soldier Field de Chicago, inauguró el certamen, con 63.117 espectadores en las gradas. Los alemanes llegaron a defender el título ganado en la edición de Italia 1990, mientras que Bolivia, con una plantilla con jugadores altamente técnicos buscaba dar la sorpresa.

Quinteros y Klinsmann tuvieron un duelo que duró 90 minutos. Con el número 5 en su espalda, el ahora seleccionador ecuatoriano tuvo que marcar al fuerte y potente delantero alemán, hoy técnico de EE.UU. Lo siguió en el centro de la zaga y lo neutralizó en el juego aéreo.  

Tan intenso fue el partido entre bolivianos y alemanes, y fuerte la marca, que Quinteros a los 89’ fue sancionado con tarjeta amarilla por el juez mexicano Arturo Brizio, luego de una fuerte falta.

El mismo Quinteros le comentó a Diario EL TELÉGRAFO -en enero de 2015- que era un defensa que le gustaba salir jugando con el balón al piso y que participaba del sistema colectivo. Desde ese puesto (zaga) llegó a marcar goles, aunque con la selección boliviana solo logró uno entre 1993 y 1999.

Mientras que Klinsmann llegó a la cita mundialista como uno de los mejores delanteros del planeta. En el Mundial de 1990, en Italia, fue una de las piezas claves del elenco alemán, tras marcar tres goles. Mientras que en EE.UU. 1994 anotó cinco tantos. Sus características principales dentro del campo eran un excelso remate de cabeza y eficacia sencillez al  momento de definir; por su corpulencia podía ingresar al área abriéndose entre la defensa, pero también jugaba sin balón.

La ‘batalla’ en el partido inaugural del Mundial 1994, finalmente la ganó Klinsmann, al marcar el tanto de la victoria a los 61 minutos para los alemanes. Se escapó de la marca de los zagueros -rompiendo la trampa del offside- y tras recibir el balón solo frente al arco, venció a Carlos Trucco y decretó el 1-0.

De esa manera, Klinsmann tuvo el honor de marcar el primer gol del decimoquinto Mundial de Fútbol,  aunque ese día no fue el mejor de la cancha, debido al fuerte sistema defensivo de Bolivia, así lo destacó en su crónica del partido la Agencia AFP, el 18 de junio de 1994.

El gol alemán llegó cuando mejor jugaba Bolivia. Tal como lo hace ahora la Selección Ecuatoriana dirigida por Quinteros, en 1994 el conjunto del ‘Altiplano’, presionaba en media cancha, controlaba el balón y tenía su zaga -liderada por el ahora DT- adelantada, prácticamente a 40 metros del arco de Trucco.

A pesar del gol y de la victoria, el equipo teutón no pudo dominar a su rival. Fue Bolivia, que por varios minutos controló las acciones, con Quinteros como base del sistema colectivo diseñado ese año por el DT español Xabier Azkargorta, quien contó con quizás la mejor generación de jugadores bolivianos. El sitio web Historia del fútbol Boliviano, calificó al juego colectivo de la selección como un ‘tic-tac’ perfecto, debido a la excelencia de los pases. “Sale Quinteros del área para (Vladimir) Soria, este a (Miguel) Rimba que se la da a (Julio César) Baldivieso, quien con taco pasa a (William) Ramallo, el nueve entrega un pase retrasado a Platiní (Sánchez) que remata de media distancia, despejado apenas por Illgner con dificultad”.

Ahora como técnicos

Hoy, tras 22 años, Quinteros y Klinsmann se vuelven a ver -en un partido oficial y justamente a mediados de junio, a un día del aniversario de su contienda- como técnicos de Ecuador y EE.UU., en un encuentro por los cuartos de final de la Copa América Centenario. El pasado 25 de mayo, ambos técnicos ya se enfrentaron, pero en un partido amistoso en Texas. Ese día la Selección Ecuatoriana perdió 1-0, aunque no contó con su plantilla completa. Walter Ayoví y Antonio Valencia no jugaron porque aún no se habían concentrado con la ‘Tri’.

A pesar del marcador en contra, Ecuador dominó las acciones, según las estadísticas: remató tres veces al arco, tuvo el 54% de la posesión de la pelota, realizó 354 pases y cobró seis tiros de esquina. Casualmente, los dos estrategas dirigieron las selecciones de sus respectivos países, sin lograr mayor éxito. Quinteros se hizo cargo de Bolivia desde 2010 hasta 2012 y Klinsmann entrenó a Alemania entre 2004 y 2006.

Klinsmann llega al encuentro de esta noche con la misión urgente de ganar y acceder a las semifinales. Hace una semana fue duramente criticado por la prensa de EE.UU. por la derrota 2-0 en el debut. Pero más que el resultado, la molestia de los hinchas norteamericanos es que su equipo no tiene un juego agradable.

En ese sentido Klinsmann se defiende y asegura que sus jugadores están comprendiendo el sistema que quiere implementar. Según el alemán, su plantilla está preparada para adaptarse a varios esquemas, dependiendo del rival de turno. Sobre Ecuador dijo que tendrá mayor cuidado en sus delanteros. “Tenemos que estar preparados para sufrir. Ecuador va a ser un oponente complicado. Ya jugamos contra ellos en un amistoso antes de la Copa América y les ganamos 1-0, pero era un Ecuador distinto, no tenía a Antonio Valencia ni Walter Ayoví”.

Por su parte, Quinteros coincide con Klinsmann al afirmar que el partido de esta noche será distinto al del 25 de mayo, porque ahora se juega por puntos y por clasificar a las semifinales de la Copa América Centenario. De lograrlo, la ‘Tri’ igualaría lo conseguido en la edición de 1993, cuando se ubicó entre los cuatro mejores equipos del certamen.

El estratega argentino-boliviano reconoció que en el último partido, frente a Haití, su equipo jugó tal como desea y como han trabajado desde que asumió el cargo. “Estuvimos motivados. Así debemos jugar siempre, con la máxima intensidad. Buscamos provocar situaciones. Generamos mucho ataque, eso es lo que me deja conforme”.

Quinteros reconoce que sus equipos tienen que presionar en todas las líneas del campo, pero principalmente en cancha rival, para evitar que se generen jugadas ofensivas en contra. “Debemos priorizar en la velocidad, la presión y en los contragolpes por las bandas”. (I)

La Tricolor y el anfitrión abren los cuartos de final de la competencia

Un Ecuador invicto y sólido enfrenta esta noche (20:30) al anfitrión Estados Unidos, agrandado tras haber ganado el denominado ‘grupo de la muerte’, en la apertura de los cuartos de final de la Copa América Centenario, en Seattle.

El encuentro entre ecuatorianos y norteamericanos, a priori muy parejo, se realizará en el estadio CenturyLink Field de esta ciudad, cerca de la frontera con Canadá y conocida por su afición particularmente ruidosa.

Tras un flojo arranque con derrota 2-0 ante Colombia, Estados Unidos se levantó primero con una goleada 4-0 ante Costa Rica y luego se impuso a Paraguay por 1-0 para ganar el grupo A de esta inédita edición del torneo continental.

De su lado, Ecuador quedó segundo en el grupo B, en el que Brasil resultó sorpresivamente eliminado. Empató dos veces: primero con la ‘canarinha’ (0-0) y luego con Perú (2-2); y finalmente selló su clasificación a cuartos de final tras golear 4-0 ante Haití.

El ganador de esta llave de cuartos de final se cruzará en semifinales con el vencedor del partido que jugarán el sábado Argentina y Venezuela.

Para el anfitrión es una gran ocasión de mostrar su progreso bajo la discutida dirección del alemán Jürgen Klinsmann, que llevó al equipo a octavos de final del Mundial de Brasil 2014 dejando en el camino al Portugal de Cristiano Ronaldo.

Pero enfrente tendrá a un duro Ecuador, que lidera con Uruguay la eliminatoria mundialista de la Conmebol para Rusia 2018 y es capaz de jugar de igual con Brasil o Argentina, a la que venció en octubre pasado en Buenos Aires.                

El CenturyLink Field no es la mítica Bombonera del Boca Juniors de Argentina ni el Maracaná de Río de Janeiro, pero los aficionados del club Seattle Sounders de la liga estadounidense (MLS) son conocidos por crear su propia caldera.

Más aún con la presencia la selección de su estrella, el ‘vaquero’ Clint Dempsey, una de las figuras de esta Copa América con dos goles, uno de ellos decisivo el sábado pasado ante Paraguay.

Los ecuatorianos estuvieron una sola vez entre los cuatro mejores, en el torneo continental que organizaron en 1993, tropezando con México.

Estados Unidos también llegó una vez a las semifinales de la Copa América, en Uruguay 1995, donde perdió ante Brasil y quedó cuarto tras caer nuevamente ante Colombia, en el partido definitorio.

Ambos se enfrentaron recientemente en un amistoso ganado 1-0 por Estados Unidos a fines de mayo en Dallas, aunque el historial global favorece a los sudamericanos con cinco triunfos, cinco empates y  tres derrotas.                               

El entrenador argentino-boliviano Gustavo Quinteros ya cumplió con la expectativa mínima colocando a Ecuador en cuartos de final de la Copa América por primera vez desde la edición de Bolivia 1997.

“Ellos (EE.UU.) llevan todas las de ganar, pero el que mejor haga las cosas es el que se va a llevar el triunfo”, dijo el martes pasado el zaguero central Arturo Mina.

Quinteros cuenta con una ‘generación dorada’ integrada por valores internacionales como Antonio Valencia, Jefferson Montero y Énner Valencia.

El DT tenía una duda para el partido, pero parece resuelta: el delantero Miler Bolaños, lesionado contra Perú y ausente ante Haití, no sería finalmente de la partida y en su lugar seguiría el delantero centro, Jaime Ayoví.

Mientras Klinsmann, que estuvo entre la espada y la pared hasta la goleada ante Costa Rica, quiere acallar bocas.

El anfitrión tendrá la baja obligada del lateral derecho DeAndré Yedlin, expulsado ante Paraguay en la fase de grupos.

Su lugar sería ocupado por Michael Orozco o el marcador de punta izquierdo Fabián Johnson, quien en ese caso dejaría su lugar a Édgar Castillo. (I)