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El Telégrafo
Rosalía Arteaga Serrano

Tiempo para la reflexión

24 de diciembre de 2019 - 00:00

La celebración del nacimiento del Niño de Belén, de quien vendría a cambiar la historia de la humanidad e inclusive para determinar la forma de medir el tiempo en antes de Cristo (a.C.) y después de Cristo (d.C.), se ha transformado en un tiempo de bullicio, de agitación, de carreras contra el tiempo.

La elaboración de cenas, las compras de diversos regalos, la asistencia a la celebración de novenas con comidas opíparas, de reuniones conmemorativas, hace que la gente pierda el verdadero sentido de lo que se celebra con la llegada del Salvador.

Pero aún en medio de la algarabía generalizada, es necesario mantener espacios de reflexión, de pensar en las cosas importantes de la vida, en lo que de veras cuenta, que es la calidad de las relaciones humanas, la posibilidad de ejercer la solidaridad con quienes tenemos en derredor, la necesidad de compartir con los otros.

El espíritu cristiano de regocijo por la llegada del Niño Jesús alcanza su dimensión real en la capacidad de pensar cómo fortalecernos como personas y sociedad, para volvernos más solidarios y más abiertos al diálogo para entender la diversidad de los seres humanos.

Cada día más, y en todos los espacios, no importa en qué rincón del mundo nos encontremos, es más fácil percibir la diversidad. La gran movilidad de la que ahora somos parte nos trae a la puerta de nuestros hogares la percepción de la diversidad de razas, de costumbres, de idiomas, de nacionalidades, lo que indudablemente enriquece nuestra visión y nuestra comprehensión.

Como en el “tiempo hay de todo” del Eclesiastés, en tiempo de la Navidad el tiempo es de la apertura mental, de la solidaridad, de la comprensión, del despojarnos de los intereses unilaterales y pensar en la maravilla de la visión total del prisma que nos ofrece la realidad, la que tenemos a la mano y la que está un poco más allá, al otro lado del mundo.

Felicidades para todos, aprovechemos para reflexionar y para extender las manos. (O)

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