Ecuador, 19 de Abril de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
José Gonzalo Bonilla

Galo, mi amigo, tiene coronavirus

01 de abril de 2020 - 00:00

Tratar el tema de la pandemia del covid-19 como mero espectador es muy diferente a reflexionar cuando un ser querido ha sido contagiado. Sufro con él la batalla que está librando. Me imagino que, a estas horas de la noche en que escribo esta nota, pasará revista a todos los momentos buenos y malos de su vida. Este ejercicio lo sostendrá él con su soledad en la habitación del hospital. Estoy seguro de que, cuando vuelva a abrir sus ojos, y el fatídico trance haya pasado, Galo, mi amigo, despertará con mayor sabiduría que la de siempre.

Me imagino que durante la noche pensará en cuán frágiles son los principios y valores con los que hemos construido nuestra cultura. Acaso revisará los valores con los que tejió sus sueños. Hasta podrá estar poniendo en duda la existencia de su dios, al que lo rezaba todas las noches.

Cuando abra nuevamente los ojos estará más seguro de que el Homo Empaticus siempre vencerá al Homo Economicus. Porque el ser humano no es egoísta por naturaleza como sostenía Hobbes. Y aunque haya pasado la noche en total soledad, él sabe que tiene amigos y familia que le sostienen. A la enfermedad la combatirá tan solo el amor. En lenguaje freudiano será el Eros que se impondrá sobre el Thanatos. El instinto de vida se impondrá sobre el instinto de muerte.

La enfermedad puede ser un mecanismo humano que, siguiendo a Nietzsche, puede hacernos más fuertes. Y Galo, con toda seguridad, saldrá bien librado porque ama la vida. El sufrimiento de la enfermedad conduce a quien ama la vida a la búsqueda del sentido de la vida misma. Exige al enfermo la revisión crítica de los valores hasta ahora practicados. El paciente se replantea la existencia o no de una deidad, llámese motor inmóvil o Dios o cualquiera de los nombres dados a la divinidad.

A Galo, como a muchos, la vida y su percepción sobre la misma, ya no podrán ser como antes. Apuesto a que haber triunfado sobre la muerte, la enfermedad los hará más humanos. (O)

Contenido externo patrocinado