Nuestra patria está viviendo una verdadera revolución de cambio en: salud, educación, carreteras, puentes, puertos, aeropuertos, hidroeléctricas, etc…, etc. Todo lo realizado se lo hizo bien y a tiempo, utilizando correctamente los recursos obtenidos del petróleo. Lamentablemente, más tarde el precio del barril de petróleo decayó, afectando la economía a nivel mundial.
A pesar de esta afectación económica de origen externo, el Gobierno no tomó medidas atentatorias contra el pueblo. Como sí se lo hacía en el pasado, con el famoso paquetazo (alza de gasolina, luz, gas, pasaje, etc.).
Estamos seguros de que este Presidente ha dejado sembradas las bases hacia un mejor futuro, con el convencimiento de que vendrán días más prósperos.
Hoy los mismos de siempre (la partidocracia) que tanto daño causaron al país, ya están en plena campaña electoral, haciendo pactos políticos para más tarde repartirse los ministerios, las aduanas, etc.
Afortunadamente, nuestro pueblo ha madurado y le quedan dos alternativas: volver al pasado o continuar con este proceso revolucionario de cambio que transformó a Ecuador, ante la atenta mirada de propios y extraños. (O)
Dr. Juan Pablo Sanz