¡Panas!, cuestionar paradojas normalizadas es importante
Hace un par de días estaba jugando Fortnite como buen pana rata y viviendo en carne propia la nueva temporada tematizada en Los Simpson: personajes, ubicaciones, referencias por montones y un rediseño total del arte. Entonces, un gran amigo en Argentina me preguntó por qué cambiaron todas las referencias a la cerveza Duff por una bebida inventada sin alcohol. Le expliqué elocuentemente que en Estados Unidos la edad para consumir alcohol es de 21 años y que debían adaptarse a su público objetivo. Pero él me dejó frío: “Ah, ¿entonces las armas son de juguete?”. Touché. En EE. UU. pueden comprar rifles y escopetas desde los 18, y en varios estados la posesión de armas largas por menores no tiene una edad mínima federal si hay tutor. Curiosa paradoja, no puedes tomar cerveza a los 20, pero sí tener una escopeta a los 12.
Panas, ¿qué tal esa introducción en vez de arrancar con la definición RAE? Novedosa, ¿no? Ahora abramos la caja de Pandora de paradojas reales que tratamos como normales. Prometo que al menos una les volará la cabeza.
- “Ahorra agua” en casa, pero las tuberías de la ciudad desperdician miles de litros con fugas cada día.
- “No spam” en la casilla de registro, pero el servicio funciona solo si aceptas marketing.
- Apps que invitan a “tomar un descanso”, pero diseñadas con scroll infinito para ser adictivas.
- Bebidas sin azúcar añadida, pero vienen cargadas de edulcorantes.
- Bonos verdes para autos eléctricos, pero los buses viejos contaminan la ciudad.
- Campañas antibullying en las escuelas, pero la humillación gana premios en los realities.
- Cero dopaje en las reglas, pero analgésicos fuertes normalizados en la competencia.
- Colegios sin celular “para evitar adicciones”, pero las tareas y avisos se suben a plataformas digitales.
- Cruzadas contra la obesidad, pero el combo gigante cuesta menos que una ensalada fresca.
- Donar órganos es virtud en el discurso, pero llegan primero a privilegiados.
- Educación sexual formal en silencio, pero la pornografía es profesora a tiempo completo.
- Etiquetas “claras”, pero con letra minúscula y palabras técnicas.
- Supermercados “ecológicos” que cobran la funda, pero venden fruta en triple empaque.
- Trabajo remoto con “flexibilidad”, pero te piden estar conectado 24/7.
Una nota distinta para pensar. ¿Cuál les llamó más la atención? ¿Se las sabían todas? Como dato curioso, inicialmente escribí 60. Así que, si hoy no les volé la cabeza, ¡seguramente la próxima sí!