Ecuador, 20 de Mayo de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Ketty RomoLeroux G.

Papel decisivo de URSS en derrota del fascismo

21 de mayo de 2015

El pasado 9 de mayo se conmemoró el 70 aniversario del fin de la Segunda Guerra Mundial, cuyo papel trascendental en la derrota de la Alemania fascista, el Japón militarista y sus aliados lo jugaron el pueblo soviético y sus fuerzas armadas. Sin embargo, sectores de  la historiografía contemporánea tratan de tergiversarlo y hasta ignorarlo. Los hechos históricos testimonian lo que fueron capaces, al conseguir con sus propias fuerzas el viraje radical en la confrontación con la Alemania fascista.  

El 30 de abril de 1945, el Ejército Rojo colocó en lo más alto del Reichstag la bandera de la Unión Soviética con la hoz y el martillo. La imagen recorrió el mundo, como el símbolo de la victoria soviética sobre el nazi-fascismo. El 9 de mayo de este mismo año, el jefe militar alemán Wilhem Keitel firmó la rendición incondicional de la Alemania nazi ante el mariscal de la Unión Soviética, Gueorgi Zhuk.

La entrada de la URSS en la Segunda Guerra Mundial significó que a la lucha contra el agresor se sumaba el ejército soviético, el mayor de todos los ejércitos que hicieron frente a los ocupantes, por lo que el centro de las operaciones militares se trasladó al frente soviético-alemán. Desde el 22 de junio de 1941 hasta el 9 de mayo de 1945 fue el frente decisivo. El conflicto bélico más grande de la historia. El Ejército Rojo había ganado las batallas de Moscú, Leningrado, Stalingrado, Kurks y Berlín. La de Stalingrado, la más larga y sangrienta, tuvo una significación especial.

Tampoco podemos olvidar que la URSS hizo la principal aportación -en el plano de la guerra convencional- para lograr la victoria contra el Japón militarista. Precisamente las tropas soviéticas derrotaron en agosto de 1945 al poderoso Ejército japonés, obligándolo aceptar las exigencias de la coalición antihitleriana. La entrada de la URSS en la guerra contra Japón fue el factor decisivo que aceleró su terminación en Asia y en la liberación de los pueblos de otros países del yugo fascista-colonialista.

Para celebrar la victoria y rendir homenaje a sus padres y abuelos, y al pueblo soviético en general, el Gobierno realizó un impresionante desfile militar, que comenzó en la Plaza Roja de Moscú, encabezado por el presidente Vladimir Putin, portando una foto de su padre, excombatiente, acompañado de treinta presidentes invitados extranjeros, entre ellos Raúl Castro y Nicolás Maduro.

En su discurso trajo a la memoria lo que significó la Gran Guerra Patria y la victoria del Ejército Rojo sobre la coalición fascista en la que la Unión Soviética perdió más de 27 millones de personas. Abogó por la creación de un sistema de seguridad colectiva, libre de bloques militares… por la sustitución del mundo unipolar por un mundo multipolar, donde sean respetados los derechos humanos.

Conviene recordar, que concluida la guerra, en el plano internacional, la esencia humanista de la Unión Soviética se manifestaba en la lucha por la paz mundial, sobre la base del principio de la coexistencia pacífica de los países con diferente régimen sociopolítico.

Lo expresado nos lleva a concluir que la desaparición de la Unión Soviética y el campo socialista es el crimen político de mayor magnitud que ha vivido la humanidad. (O)

Contenido externo patrocinado