Publicidad

Ecuador, 31 de Julio de 2025
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
+593 98 777 7778
El Telégrafo
Ecuado TV
Pública FM
Ecuado TV
Pública FM

Publicidad

Lucrecia Maldonado

Palabras, palabras, palabras

25 de noviembre de 2015

Con algo muy parecido al horror veo pasar por delante de mí un bus que anuncia las corridas de toros en la Plaza Belmonte por las fiestas de Quito. Supongo que los defensores y defensoras de este espectáculo tienen razones para hacerlo y no es este el lugar donde las voy a cuestionar o a discutir. Allá cada uno con sus significantes personales. Pero por encima de que se considere ‘arte’, ‘cultura’ o lo que se quiera considerar, ocurre que hace algunos años el pueblo del cantón Quito ya se manifestó respecto de este tipo de actividades, y lo hizo mayoritariamente.

Tampoco voy a hablar del actual alcalde como persona, ni siquiera como funcionario. Lo único que me autorizaría a hacerlo es tener la conciencia tranquila por no haberle dado mi voto, pues sabía de lo que se trataba, y lo estoy mirando todos los días. Allá la gente que votó por él ‘contra Barrera’ (todo termina siendo taurino, ahora que me doy cuenta), solo porque quería manejar como le daba la gana sin que le cayera ningún tipo de castigo (también a eso se reduce todo).

Y peor pienso referirme más que en este par de líneas a la gente que, en un alarde de suprema ignorancia, manifiesta que fue Correa quien les ‘quitó los toros’. No. ¿Para qué?

Lo que, aparte de todo lo mencionado, importa realmente, es cómo se irrespeta paladinamente la voluntad popular expresada en las urnas. Esa gente muñequera que cuando es mayoría defiende la democracia y cuando es minoría defiende los derechos de las minorías hace de las suyas en todas partes. Lo único que le interesa es salvaguardar sus intereses, ni siquiera taurinos, sino económicos. La manipulación de argumentos, verdades a medias y mentiras completas, presiones al alcalde que dijo que no se ‘ahuevaba’, pero no dijo que depende de ante quiénes, y muchas más arteras triquiñuelas han terminado haciendo que esa minoría en concreto se salga con la suya.

Pero por sobre el ritual sangriento, la falta de consecuencia del pueblo de Quito (con vergüenza lo reconozco), más allá de sus gustos o del amor por la españolada que hasta en ciertas regiones de España ya es repudiada, por encima de sus negocios y negociados, la mayoría dijimos que ‘no’. Es cierto que el texto de la consulta fue ambiguo y eso conduce a que se siga ejerciendo una crueldad contra un ser que no puede defenderse con la excusa de que no se le mata en el ruedo, pero sí un poquito más tarde, sin embargo, estoy segura de que si el texto hubiera preguntado explícitamente si estábamos de acuerdo con las corridas de toros, las peleas de gallos y las peleas de perros, igual habríamos contestado mayoritariamente que no. Y hasta donde yo sé, ‘no’ es ‘no’. (O)

Publicidad Externa