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El Telégrafo

Los 7 pecados capitales de nuestro balompié

24 de febrero de 2012 - 00:00

Nuestra serie “A” se encuentra en el octavo puesto de la lista de las mejores ligas de Sudamérica, según la IFFHS. ¿Por qué la nuestra  supera solamente a Bolivia y Venezuela?

1. Árbitros con poderío excesivo:

En este año ya vivimos un inconveniente arbitral relevante. El fin de semana no disfrutamos de nuestro fútbol, puesto que los árbitros decidieron no pitar, ya que rechazaban un artículo que permitía degradar a los árbitros si obtenían malas calificaciones en los partidos.

Los errores arbitrales los vemos cada fin de semana, en cada partido, eso siempre habrá. Pero nuestro balompié sufre de un arbitraje regular, en el que a los colegiados se les culpa de no permitir un fútbol más fluido y más dinámico, ya que no realizan la mejor interpretación del reglamento.

Al reanudar nuestro fútbol,  el calendario deportivo tendrá que ser reformulado.

Dos grandes errores en nuestro balompié:

Meter árbitros en Comisión Académica y de Arbitraje y darles más poder.
Prohibir la llegada de árbitros internacionales y creerse los únicos, además de sentirse, en consecuencia,  que tienen todo el poder.

2. Empresarios aprovechadores:

Los empresarios  son los negociadores directos para que un equipo cuente con los servicios del jugador.
En nuestro país, varias veces se ha visto ensuciado, maniobrado y dificultado el traspaso de algún futbolista a cualquier equipo, ya que los excesivos costos -en los  que ellos quieren sacar el mayor provecho de la transferencia- hacen que los dirigentes no puedan llegar a un acuerdo. A principios de año, hubo trabas para que Frickson Erazo llegara a vestir la camiseta de Barcelona. Se decía que Luis Aguerre, representante del jugador, impedía dicha negociación. También hay  quienes se aprovechan del desconocimiento reglamentario y se llevan jugadores a los  que los clubes no les pagan un sueldo.

3. Dirigentes malvelsadores:

Los dirigentes manejan a un equipo, de su trabajo depende que sea fructífero o no. Muchos de ellos han llegado a los clubes ecuatorianos por llenar su bolsillo o figurar, mas no por trabajar en bien de la institución. Han prometido a la hinchada un sinnúmero de cosas, pero no llegaron a cumplir ninguna, incluso, dejando endeudado al plantel.

Contratan jugadores con sueldos millonarios para nuestro medio, que no llegan a rendir como se espera. No son capaces de manejar y ser líderes positivos.
Un ejemplo claro: las últimas dirigencias de Barcelona. Sólo han provocado desilusiones, deudas y rechazo rotundo de la hinchada. El “Ídolo”, además,  se ve apremiado por futbolistas como Marcelo Delgado y Samuel Vanegas, con demandas que suman casi medio millón de dólares, casos que aún no ha resuelto la FIFA.
También nos encontramos con que los dirigentes de los clubes no rinden cuentas, y después, al hacer auditorías, observamos un mal manejo a nivel general.

4. Mal trabajo en formativas:

Las canteras o las formativas son un pilar fundamental en cada equipo, pues de ahí saldrán nuevas joyas.
Nuestros equipos carecen de buenas canteras, que produzcan jugadores a la altura de un nivel de exportación, porque dichos semilleros están para eso, para reforzar en primera instancia al  equipo absoluto de la institución, y después ser exportados por su talento futbolístico.

Nuestros equipos se refugian en contrataciones extranjeras, muchas erróneas, otras eficaces, pero que tienen que cubrir los espacios de jugadores carentes en nuestro medio, a tal punto de llegar a naturalizarlos y así obtener  más cupos para traer jugadores de otro país.

5. Entrenadores mal preparados:

Grandes equipos hemos visto fracasar, grandes contrataciones hemos visto no funcionar, grandes desilusiones hemos visto alimentar.

Los técnicos tienen que saber potencializar las cualidades de un jugador, para que este sea más útil al club.  Muchas estrellas en un equipo y sin un técnico que los sepa dirigir, no van a funcionar. En nuestro balompié hemos visto cómo los entrenadores son cesados en sus servicios, los fracasos hacen que su puesto sea el que más peligro corre. El 2008 era el año de Barcelona; un buen equipo tenía, mucho se culpó a Ever Hugo Almeida por su incapacidad de poder dirigir a tantos talentos; ninguno terminó siendo importante o gravitante. El año pasado la película se repitió, con otros protagonistas, el Deportivo Quito con  Fabián Bustos y   Emelec con Carrasco, el final de la historia fue el despido de ambos técnicos. Asimismo, hay entrenadores que pasan por 2, 3 o más equipos en un mismo año.

6. Peleas entre dirigentes:  

Las cabezas de nuestro fútbol no se salvan. Desde ellas se crean conflictos y esa es una de las razones por las que nuestro balompié no avanza.  

Granizo-Chiriboga: En el 2009 Eduardo Granizo demandó a Luis Chiriboga por $5 millones. Pero al ex dirigente del Olmedo s le salieron mal las cosa, el presidente de la FEF lo demandó por daños y perjuicios y fue enviado a prisión por 6 meses.

Maruri-Noboa: Hicieron una alianza que los llevó a dirigir  Barcelona. Al cabo de 6 meses de estar en el club comenzaron las pelas y las discusiones. Antonio Noboa renunció a la Comisión de Fútbol y Maruri perdió su apoyo económico, además Luis Noboa quería llegar a la presidencia del cuadro amarillo, pero Maruri nunca renunció y comenzaron los enfrentamientos entre ambos.

Chiriboga-Paz: Con la aprobación del canal del fútbol, el apoyo de Rodrigo Paz a Luis Chiriboga decayó, pues el dirigente “albo” niega rotundamente aceptar que los derechos de su club pasen a manos de la FEF. Paz  arremetió fuerte contra Chiriboga, expresando: “Es una absoluta falta de respeto del presidente de la Ecuatoriana. Ya está saliendo a la luz cómo se manejó este proceso, con las declaraciones de Manolo Holguín (ex directivo de Macará, que involucró a directivos de la FEF en la propuesta sugerida por la Asociación de Tungurahua para los derechos de transmisión)”. 

Guarderas-Noboa: Antonio Noboa, presidente de Barcelona, afirma que no tiene el apoyo que debería tener su club por parte de José Javier Guarderas, presidente de Asoguayas. Declaraciones fuertes entre ambos derivaron en que Barcelona abandonaría esa asociación para pertenecer a otra  que sí lo apoye.

7. Limitado apoyo a la selección

Nuestros clubes se han caracterizado por no ceder los jugadores a la selección, cuando se juega algún partido amistoso, que sirven como preparación para las eliminatorias sudamericanas. Se escudan al decir que los elementos llamados por el técnico son vitales para el equipo en el que se desempeñan profesionalmente, y que en caso de ser cedidos perderían figuras  fundamentales, titulares.
Cuando mejoremos estos inconvenientes nuestro balompié avanzará, pues futbolistas tenemos, y a nivel deportivo hemos sin duda  mejorado, pero a nivel dirigencial y arbitral aún no hemos progresado.

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