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América celebra los cien años del Indigenismo y su influencia en la transformación americana y el nacimiento de géneros artísticos y literarios.
En ello se menciona los discursos de José Martí el apóstol de la revolución de Cuba, quien rechazaba la teoría de las razas que planteaba la separación de la humanidad en razas negra y blanca. La Revolución Mexicana y la presencia de sus muralistas y su influencia en el arte ecuatoriano. En Ecuador la presencia de escritores como Pío Jaramillo Alvarado, Aquiles Pérez, Fernando Chávez.
Yo mencionaría a Juan Montalvo quien expresó: “haría llorar al mundo cuando hable sobre la miseria de los indios”, Jorge Icaza y su obra Huasipungo, Benjamín Carrión quien recogió la famosa expresión “Chaupi punchapi tutayarca” “anocheció en la mitad del día” que según se dice fue expresada por la sociedad andina al enterarse de la traidora muerte de Atahualpa su Apu en manos de los usurpadores españoles.
A nivel político se destaca a la Federación Ecuatoriana de Indios FEI en las personas de Dolores Cacuango y Tránsito Amaguaña como los gestores de la voz propia del indigenismo quienes clamaron su reclamo por el maltrato del yugo feudal del que eran víctimas.
Desde mi visión actual como Indígena Kichwa me pregunto ¿qué ha pasado con esa semilla del indigenismo? A nivel político la presencia indígena se toma como pasto fresco para ser alimentado al rebaño, es decir, la presencia indígena en la política diversifica la policromía de representatividad mas no se potencia el partido o movimiento.
En este proceso histórico menciono el Primer Levantamiento Indígena de los 90, su impacto tenía diversas aristas: unos expresaban alarma que sus reclamos pueden desembocar en la desaparición de las Haciendas, tanto que hasta en los medios se titulaba como “El despertar del gigante dormido”.
Sus grandes movilizaciones provocaron la caída de tres gobiernos y por primera vez se miraba en las calles manifestándose juntos Indios y ‘Blancos’. Actualmente el protagonismo indígena tiene sus nombres y apellidos a nivel organizativo con la presencia de la Conaie, Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador, Fenocin y el movimiento político Pachakutik.
Cierro mi reflexión con estas frases de Guillermo Bonfil Batallas: “Hablar de lo indio no es volver al pasado y quedarse ahí, es un poderoso llamado para caminar al futuro”. (O)