“Si un país no conoce su pasado, no puede construir su futuro”, dice un viejo aforismo popular. El Ecuador de hoy vive un proceso de transformaciones económico-sociales, en una época en la que comienza a estructurarse un mundo nuevo, multipolar. Por lo que es de suma importancia conocer en forma general algunos antecedentes políticos de carácter nacional y su influencia en la sociedad ecuatoriana contemporánea. Los jóvenes, principalmente, desconocen los grandes acontecimientos históricos nacionales, las luchas de nuestro pueblo, verdadero artífice de los mismos.
El pasado 5 de junio se conmemoraron 120 años de nuestra gran Revolución de 1895. La liberal, liderada por Eloy Alfaro Delgado, cuyo triunfo fue el inicio de un proyecto económico, social e ideológico de avanzada en nuestro país. Sin embargo, no podríamos decir que existía el partido liberal. Este nace después de su asesinato, ocurrido el 28 de enero de 1912. Las profundas transformaciones provocadas por la Revolución Liberal modificaron irreversiblemente las condiciones del estado autocrático nacional. Para entonces, el clero actuaba como especie de partido político, de portavoz del conservadorismo, cuyo lema era ‘Por Dios y por la Patria’. Si bien la ideología liberal es catalogada como anticlerical en el gobierno alfarista, no existió como partido hasta 1925, denominándose Partido Liberal Radical Ecuatoriano.
Para entonces, ya se había llevado a cabo la primera huelga general dirigida por la clase obrera, que concluyó con la masacre del 15 de noviembre de 1922. Influenciada por la Revolución Rusa, las ideas de la Revolución Mexicana de 1910, con el asesoramiento del obrero cubano Miguel Albuquerque, quien vivía en Guayaquil. El mismo que contribuyó a la fundación del Partido Socialista Ecuatoriano, cuya asamblea constitutiva se realizó en la Universidad Central el 13 de diciembre de 1925.
Del cual se desprendió su núcleo más radical y fundó el Partido Comunista del Ecuador, el 23 de mayo de 1926. Las circunstancias políticas llevaron al partido a participar en las elecciones de 1931 con Antonio Ruiz Flores como su candidato presidencial, proveniente del gremio de peluqueros de Milagro. Era la época en la que se sostenía que el proletariado estaba llamado a dirigir la sociedad. Mas, el caudillismo del doctor Velasco Ibarra, cinco veces presidente de la República, frustró estas ilusiones. En los finales de la década de los 50 e inicios de los 60, dos acontecimientos internacionales sacudieron la izquierda: la Revolución Cubana y el surgimiento del Partido Comunista Marxista-Leninista, el cual propone la vía armada para la toma del poder.
La trágica muerte de Jaime Roldós se llevó consigo ‘la fuerza del cambio’. Con el gobierno de su vicepresidente democratacristiano Osvaldo Hurtado, se inicia la etapa neoliberal, que se reforzó con la desaparición del campo socialista en 1991. El gobierno siguiente, el de León Febres-Cordero, caracterizado por la violencia, originó el grupo Alfaro Vive Carajo. Pero es el régimen democristiano de Jamil Mahuad el que lleva al país a la peor crisis financiera de las últimas décadas, con el feriado bancario y la dolarización.
Frente a una crisis total, no solo económica, triunfó el Ec. Rafael Correa Delgado en 2007, con Alianza PAIS. Movimiento que aglutina a muchas organizaciones políticas y sociales en pos del proyecto político denominado Revolución Ciudadana, cuyo objetivo es la conducción del Ecuador hacia el Buen Vivir o Socialismo del siglo XXI. Combatido por la oligarquía y el imperialismo. Es triste decirlo, pero la izquierda ecuatoriana carece de un proyecto político nacional para enfrentarlos. (O)