Gobierno entrega viviendas para beneficiar a 123.000 ecuatorianos
Este miércoles 28 de abril de 2021, Rocío de Moreno, presidenta Ad Honórem del Plan Toda Una Vida, junto a Julio Recalde, Ministro de Vivienda; e Isabel Maldonado, secretaria Técnica del Plan Toda Una Vida, asistieron a la urbanización La Dolorosa, para entregar viviendas a personas en situación de pobreza y pobreza extrema. El acto se enmarca dentro de la Misión Casa Para Todos que, esta ocasión, tuvo lugar en Atuntaqui. Las autoridades entregaron las escrituras de las viviendas durante la visita.
La entrega beneficiará a más de 123.000 personas como parte de esta política pública integral que tiene como principio que “la vivienda no es el fin, sino el inicio de una nueva vida con más oportunidades en comunidad”, como ha sostenido el Presidente Lenín Moreno.
Entre los beneficiarios se encuentran personas con discapacidad. Tal es el caso de Olga Muenala, Rosa Morán y Jairo Baraja, que recibieron las llaves de su vivienda de manos de la primera dama, Rocío de Moreno.
“Mis mejores momentos durante estos cuatro años los he vivido junto a las familias más vulnerables del Ecuador, recorriendo las urbanizaciones de Casa Para Todos, que son comunidades participativas, seguras, inclusivas y emprendedoras. Hoy es un día de mucha emoción porque cumplimos con la entrega de escrituras a las familias, cerrando el ciclo de acompañamiento comunitario”, indicó Rocío de Moreno.
Por su parte, Julio Recalde, ministro de Vivienda destacó el trabajo interinstitucional que se requiere para entregar las escrituras de las viviendas en todas las urbanizaciones de la misión Casa Para Todos, responsabilidad que es compartida, en especial, con los GADs.
En las urbanizaciones de Casa para Todos se crearon cerca de 400 huertos familiares y comunitarios que proveen de alimentos saludables a las familias. El reciclaje asociativo es otro de los proyectos sostenibles, exitosos que se ejecutan en estos barrios, con el que se ha logrado recuperar 12,98 toneladas de residuos sólidos, generando ingresos para beneficio de toda la comunidad.
A estos proyectos se suman: la implementación de la iniciativa Barrio Verde, el fortalecimiento de las capacidades y habilidades a más de 2.500 vecinos y vecinas; y el trabajo por la inclusión y equidad de género que realizan más de 4.000 mujeres en todas las urbanizaciones del país.
“Mi vida cambio el 100 % gracias a la nueva casa, ahora vivimos en un sitio seguro donde nos sentimos a gusto porque nos llevamos con todos los vecinos, trabajamos juntos y somos como una nueva familia”, indicó Marco Cherrez, quien tiene un negocio gastronómico en uno de los 15 locales comerciales comunitarios que funcionan en la urbanización San Alejo, en Portoviejo.
