La jueza que interrogó al expresident observa contradicciones en la euroorden emitida por España, mientras el gobierno de Rajoy dice que el delito de Puigdemont atenta contra la UE.

Los delitos por los que la Justicia española reclama al expresidente catalán tienen correspondencia en la legislación alemana, con penas incluso más duras que en España.

La detención se produjo gracias a la cooperación de los servicios secretos españoles y las fuerzas de seguridad alemanas.

Tras seis meses de las elecciones, el presidente alemán la nombró formalmente como canciller tras obtener el respaldo mayoritario de 364 votos en el Parlamento.