Sudáfrica aceptó finalmente este martes volver a jugar contra Senegal, como lo había decidido la FIFA, tras un partido marcado por un penal totalmente imaginario pitado tras una mano inexistente, que condujo a las instancias a suspender al árbitro de por vida. 

"Hemos estimado que, tanto en un plano ético como moral, no nos podíamos beneficiar de un acto de corrupción. Hemos decidido por tanto aceptar la decisión de volver a jugar el partido en una fecha a precisar", explicó la federación sudafricana en un comunicado. 

El 6 de septiembre, la FIFA había decidido que se vuelva a jugar este partido de clasificación ganado el 12 de noviembre de 2016 por Sudáfrica en casa contra Senegal (2-1), tras haber suspendido de por vida al árbitro por "manipulación de partido".

En un primer momento, Sudáfrica no excluyó intentar un recurso contra esta decisión. Pero se plegó finalmente.

La decisión de la FIFA le viene bien a Senegal, actualmente tercero de su grupo a un punto de Cabo Verde y Burkina Faso, cuando solo quedan dos jornadas por disputar. Solo el primero del grupo conseguirá su billete para el Mundial-2018 en Rusia.

En cambio, los Bafana Bafana son últimos de grupo y la retirada de esta victoria agrava su situación. (D)