El hotel, que ya fue objetivo de un ataque similar en 2011, es frecuentado por extranjeros y afganos adinerados.

El bombardeo se produjo luego de que "un elemento infiltrado" en el seno de las milicias disparó contra las tropas estadounidenses.

El ataque contra los militares se produjo dos días después de un atentado que dejó 103 muertos y 235 heridos.

Una carga explosiva colocada en una motocicleta detonó cerca de donde una multitud asistía al funeral.

Una serie de explosiones dentro de un centro cultural chií mató a 41 personas y dejó 84 heridos. El grupo Estado Islámico reivindicó el ataque, pese a que EE.UU. y Afganistán reclaman sus avances contra yihadistas.

El centro de entrenamiento "80" es el más importante de los NDS, donde se forman todos los agentes de los servicios de información.