La medida que restringe el tránsito vehicular en Quito, de acuerdo al último dígito de la placa, comenzó simultáneamente con la primera etapa del plan de repavimentación de calles.

Estos vehículos no requieren de gasolina para funcionar, ni que su conductor cuente con licencia o matrícula. Su diseño es ligero, fácil de cargar y, en muchas ocasiones, plegable. Esto permite que el propietario las guarde en algún lugar seguro, luego de usarlas.

La capital cuenta con dos tipos de bicicletas. Las convencionales, que se mueven con la fuerza del pedaleo; y las eléctricas, que integran motor, batería, controlador y tres marchas que se adapta a la distancia, tiempo y la superficie por donde se circula.

Se sumarán los 1.923 agentes civiles de tránsito de la capital. Ellos se encargarán de alertar a los fiscalizadores sobre la presencia de eventuales infractores de la norma y, en conjunto, serán 2.173 encargados del control.

Antes de los implementos de seguridad requeridos, hay que tener claro que, al salir a la calle en uno de estos aparatos, se convierten en un vehículo más que debe circular y respetar la normativa legal vigente.

Realizamos un recorrido por algunas líneas de transporte público de la ciudad y constatamos el tiempo de duración y el valor a pagar por cada uno de ellos.

María Heras fabrica y vende muebles en su local, ubicado en la avenida América. Ella comenta que con la disposición perderá un día completo de trabajo, puesto que no podrá entregar los pedidos en su camioneta.