El exarquero del combinado chileno en el Mundial de 1998 quiere dirigir la selección ecuatoriana, por eso se sigue capacitando. Luego de su salida de Barcelona -donde fue preparador de arqueros- se hizo cargo de la dirección del Guayaquil Sport.

Tuvo en 1991 su mejor año en el balompié ecuatoriano, tras ganar el título de campeón nacional con Barcelona, con él como figura. Inició en el fútbol en su natal Manabí y llegó al equipo “torero” tras un canje, por una deuda que Liga de Portoviejo mantenía con el conjunto guayaquileño. Uno de sus mayores anhelos es abrazar otra vez a su hijo Víctor, guardameta del “Ídolo”.

El exarquero del Chapecoense -sobreviviente de la tragedia de Medellín- empezó a caminar con prótesis.

El exguardameta cuenta que el primer club al que se fue a probar fue Emelec, pero el técnico le dijo que no tenía condiciones. 15 días después fue convocado por el otro cuadro del astillero.