El color es el tema central de sus pinturas. Ha realizado murales en edificios públicos y privados en el Ecuador y en su larga trayectoria como artista plástico ha mostrado su trabajo en varias exposiciones en América y Europa.

Así es Eddie Mosler, quien desde el 20 de marzo pasado expone en el Quicentro Shopping, al norte de la Capital, la segunda etapa de su obra ‘Contemplación cósmica’, una interesante exposición que conjuga el poder de la imaginación con mágicos relieves y fusiones cromáticas.

La muestra se encuentra en el área remodelada de la planta alta del ciitado centro comercial, ingresando por la puerta de la avenida Naciones Unidas.
Los amantes del arte pueden disfrutar de las pinturas de Mosler de lunes a jueves: 9:30 a 21:00, los viernes y sábados de 9:30 a 21:30 y los domingos de 10:00 a 20:00.

Esta exposición cuenta con 20 exuberantes cuadros, ocho de estos son de 2 x 1.35 metros y los demás de 1 x 1.20 metros con precios que van desde 400 a 2 mil dólares. Además, los asistentes tienen la oportunidad de observar la habilidad del pintor quiteño al elaborar nuevos cuadros en vivo.

“La primera etapa de ‘Contemplación cósmica’ estuvo más relacionada con el fuego y el mar; la segunda parte es más multicolor, como los colores del arco iris. No tenía planeado hacer una segunda etapa de la exposición, pero sentí que me faltaba algo más para acabar la colección y creé nuevas pinturas, así que es la primera vez que las expongo”, manifiesta el pintor.

Materiales como óleo, acrílico y texturas creadas por el artista se utilizaron para elaborar los cuadros, los cuales han llamado mucho la atención de las personas. “La gente pregunta sobre las pinturas, se toman fotos y les gusta pasear por el centro comercial y ver las obras”, acota el artista, quien luego de mostrar su trabajo en Quito piensa visitar Guayaquil, así como Colombia, país donde expondrá las dos etapas de la muestra.

Mosler recuerda que desde pequeño se sintió atraído por el arte. A los 5 años comenzó a hacer sus primeros esbozos y ganó el primer lugar en un concurso de uno de los principales diarios de la ciudad. A los 11 años participó en una exposición realizada en la Casa de Cultura Ecuatoriana en la que obtuvo el primer lugar, demostrando ser muy creativo desde sus primeras obras.

En 1992 se trasladó al Puerto Principal, en donde comenzó su carrera en calidad de pintor autodidacta. Es en esta ciudad donde Mosler definió su tendencia artística, plasmando en sus lienzos una combinación audaz y controlada de los colores que, a menudo llegan por su estridencia hasta los límites tolerables, definiéndose como un pintor netamente abstracto, cuyo resultado es una pintura que deleita por su delicadeza y magia cromática.

Eddie define su pintura como “atisbos de simplicidad mágica, es la explosión del color, son las formas diseccionadas por un microscopio que nos traslada a galaxias remotas y que sugiere al que la contempla inacabables y fantásticas sensaciones”, acota.