A ratos, Carlos Vives saltaba como si estuviera alentando al Unión Magdalena, el equipo de sus amores, en las gradas del estadio (es tan futbolero que una de sus canciones más recientes es ‘La copa de todos’, que será himno del Mundial Brasil 2014. Incluso se tiempo tiempo para soltar un: “Radamel, cuídate Falcao”, al final de su show en la Quinta Vergara, luego de recibir una camiseta del lesionado goleador cafetero).

Y hay más con Vives. En otros momentos hacía movimientos de piernas al estilo Cassius Clay. Y si de boxeo se trata, el mismo Vives practicaba ‘sombras’ (ese recurso entrenamiento pugilístico de simular un combate, lanzando golpes al aire, en el que quizás recordaba a ‘Gallito’ Ramírez, ese entrañable personaje que lo lanzó a la fama en 1986)

Y es que al cantante y zurdo guitarrista colombiano le sobra energía y carisma, tanta para dominar al temible ‘Monstruo’ (el público) de festival de Viña del Mar.

El de Santa Marta tuvo muy poco tiempo para hacer un recorrido musical y conquistar al público chileno que se dio cita en el anfiteatro, escenario que pisó por primera vez hace 17 años cuando comenzó su internacionalización, tras el éxito de la telenovela ‘Escalona’.

Vives homenajeó, como siempre a su Colombia y su herencia hispana con el tema ‘Déjame entrar’, que no solo hizo bailar a los chilenos, sino a sus compatriotas residentes en Viña, quienes lucían sombreros folclóricos.

Él quiso verlos. Por eso pidió a los técnicos que encendieran todas las luces para saber cuántos compatriotas lo acompañaban.

“Gracias mi Colombia por todo ese apoyo que me entregan a todas parte a los que voy. Les pido que trabajen duro por Chile y no nos hagan quedar mal”, bromeaba el también actor, quien tras bastidores anunció que volverá a Ecuador, posiblemente a Manabí.

En su repertorio no faltaron ‘Como le gusta a mi pueblo’, ‘Carito’, ‘Amanecer’, ‘Bailar conmigo’ y ‘Volví a nacer’, canciones con las que se llevó primero las antorchas de plata y oro. Cuando las recibió brometó con los animadores Carolina de Moras y Rafael Araneda, escondiéndose detrás de ellos para que no se las quiten.

Vives le concedió una de ellas a Egidio Cuadrado, su acordeonista que lo acompaña desde hace 20 años en el grupo La Provincia.

Cuadrado festejaba su cumpleaños en Viña, al menos eso dijo Vives. Y, claro, el homenajeado le dio rienda suelta a su virtuosismo con los dedos para sacar melodías de su acordeón. Eran solos que parecían interminables.

Entre el público había una pareja que se comprometieron en matrimonio durante el show. Se besaron en intercambiaron anillos. A ellos Vives les dedicó ‘Quiero casarme contigo’.

El colombiano también hizo gala de su talento para tocar la gaita folclórica de su país. Con ese sonido y el de las congas, interpretó ‘Matilde Lina’, ‘Fruta fresca’, ‘Pa Maite’ y ‘La gota fría’.

En medio de la euforia y del baile, saludó y piropeó a la ex Miss Universo chilena, Cecilia Bolocco, quien se encontraba en la primera fila con sus hijos.

El cincuentón intérprete simulaba boxear con Cuadrado, quien lo perseguía con su acordeón. Luego saludaba a quienes veía en primera fila como la española Paloma San Basilio con quien hizo un improvisado dueto.

A un extremo de la tarima, el equipo de producción del festival le pedía que terminara el show pero Vives no se dio cuenta y siguió cantando. ‘Amanecer’, ‘Bailar conmigo’, ‘Volvía a nacer’, ‘La foto de los dos’, ‘La cañaguatera’ y ‘La tierra del olvido’ con la que cerró su actuación, una cargada de energía.

Ecuador no llegó a la final de competencia folclórica en Viña

Carmen Grijalva y Pepe Ubilla, representantes de Ecuador en la competencia folclórica del Festival de Viña del Mar no clasificaron a la final de la competencia.

Ambos solamente alcanzaron 4.8 sobre 7 puntos durante la segunda ronda de la competencia.

Ellos interpretaron la misma canción que presentaron en la primera ronda: ‘Bailando bomba’.