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Verónica Jiménez: "Hay un fuerte índice de abandono en la educación virtual"

La psicóloga clínica Verónica Jiménez aconseja que los padres sean parte de la educación de sus hijos.
La psicóloga clínica Verónica Jiménez aconseja que los padres sean parte de la educación de sus hijos.
Cortesía
29 de julio de 2020 - 02:15 - Silvia Murillo

Cómo ayudar a los estudiantes en tiempos de educación virtual producto de la pandemia del covid-19. Qué están haciendo los docentes para captar su atención. Si bien el tiempo que permancen conectados es menor a cuando iban a clases presenciales, ¿existen distractores?

Estas y otras interrogantes las despeja la psicóloga clínica y directora académica de Formación Continua de Poliestudios, Verónica Jiménez.

¿Está dando resultados la educación virtual?

Hay un fuerte índice de abandono de la educación virtual; normalmente el 40% de las personas que inician una formación virtual no la concluyen, entonces es importante validar técnicas para que el docente pueda emocionar, motivar y facilitar el aprendizaje y que este estudiante se encuentre motivado para concluir su proceso educativo. Existen muchas formas de abandono de la educación virtual, por ejemplo el apagar la computadora, no ver al profesor, irse a jugar mientras están dando las clases. Entocnes nosotros debemos ayudar en esta fase de motivación entendiendo que hay elementos que ayudan a construir el aprendizaje de una manera significativa, entre ellos la neuroeducación.

¿Cómo funciona la neuroeducación para capacitar a los docentes, para que ellos a su vez emocionen a sus alumnos?

En este caso debemos considerar ciertos temas muy importantes, por ejemplo posibilitar el encontrar vías para aplicar en el aula procesos cerebrales como la emoción, la memoria, la motivación, la atención; conocer cómo estos abren las puertas de la construcción de nuevos conocimientos, es decir no solamente hablar de la parte neural sino de cómo potenciamos las habilidades propias de cada niño y adolescente en el entendimiento de que su cerebro es único. Entonces ahí podemos hablar de cómo intervenir dentro del aula; cómo tomar conciencia de que está construyendo un nuevo conocimiento; cómo podemos transformar la manera de educar, del aprender haciendo.

Lo que nosotros hacemos es que estas redes neuronales que tenemos con la educación virtual hacen nuevas conexiones que antes no se comunicaban. Entonces estas nuevas conexiones permiten que las redes se hayan ampliado, reorganizado y crezcan rápidamente. Estamos hablando en este caso de la neuroplasticidad que es la capacidad del sistema nervioso para modificar la respuesta a muchos actos. Si antes nosotros decíamos que al niño le dábamos una clase, y al inicio de la clase lo hacíamos cantar y moverse y estábamos estimulándolo, ahora debemos buscar en la virtualidad esa neuroplasticidad neuronal para que se asocie a cambios beneficiosos y adaptativos.

¿Estamos hablando del sistema neurológico?

Totalmente, inclusive de cómo podemos evitar la depresión en un caso de encierro. Los niños, los adolescentes, los jóvenes también se deprimen con el encierro, entonces la neuroeducación nos va enseñando cómo favorecer el aprendizaje y la memoria para que haya un elevado número de conexiones neuronales en esta sinapsis para un acercamiento al aprendizaje como una habilidad.

Hay algo muy importante, cuando nosotros hablamos de educación debemos entender que el docente que no emociona no educa, por tanto lo más importanate es que todos ellos deben emocionar a su estudiante, deben ayudarlo a conocer sus emociones, a identificarlas, a tener sentido su clase virtual para que no haya abandono.

¿Cómo trabajar con los docentes para que capten el interés del alumno, están a tiempo?

Sí estamos a tiempo; solo puede ser verdaderamente aprendido aquello que llama la atención y genera emociones positivas, aquello que es diferente y sobresale de la monotonía. Es el momento del cambio estructural del docente, entonces debemos fomentar la curiosidad, la supervivencia, el sobresalir, el aprender como un juego; gamificar el aula escolar, el aula virtual, permitirle al estudiante investigar más allá y ser como señala la virtualidad: un docente guía, un docente que construye nuevas prácticas.

¿Cómo se puede trabajar con estas personas?

Hay algo muy importante, cuando nosotros hablamos de neuroeducación hablamos de las neuronas espejo o neuronas copionas, porque todo lo que hace una persona el otro lo copia. Cuando veo a alguien realizando una acción automáticamente yo simulo que la acción está en mi cerebro. Cuando veo una cara de tristeza por ejemplo, yo también me siento triste y simulo ese sentimiento. Del mismo modo si yo simulo interés, siento que me gusta lo que estoy haciendo, estoy muy divertida, pues las personas que están a mi alrededor van a hacer lo mismo.

Entonces estas neuronas espejo para el aprendizaje, por ejemplo, nos sirven para la observación y luego para reflexionar sobre la empatía, sobre cómo nosotros podemos mejorar el proceso de enseñanza – aprendizaje, haciendo experimentos, observando cómo los estudiantes van desarrollando un proceso, van mejorando de acuerdo a cómo yo estimulo con pasión a la educación.

Si el docente es aburrido, no trabaja, no está enganchado con sus estudiantes, no genera táctica y solo prende la cámara y ni siquiera se ha peinado, entonces estas emociones son las que van trascendiendo en el educando.

Hay profesores que recién han aprendido a manejar sus plataformas, ¿qué deberían hacer las instituciones públicas y privadas para que sus docentes capten el interés de sus estudiantes y que no haya deserción?

Es un problema fundamental la deserción y también cómo las rutinas de vida nos han cambiado. El pobre docente necesita capacitarse, formarse, si no se forma y no se siente seguro del uso de su plataforma, del uso de sus actividades, probablemente él será un docente en abandono, es decir un docente que no sirva para la educación virtual y que haga que todos sus estudiantes se alejen de la educación, por tanto es obligatorio para las instituciones privadas y públicas formarlos y educarlos para la construcción de este aprendizaje.

Importante también nombrar que las rutinas en todos los hogares han cambiado, como pasamos encerrados, estamos en un confinamiento, suele suceder que hasta la rutina del sueño ha cambiado y hay que comenzar a poner rutinas en el hogar, como profesionales, para una adecuada higiene del sueño, para poder descansar y enfrentar un nuevo reto.

Los padres de familia o representantes de los niños están de apoyo en la casa para guiarlos, pero ese adulto también está en confinamiento y sufre por todo este cambio

Aquí necesitamos que el padre de familia se convierta en un supervisor del comportamiento de sus hijos, de su actuación y la educación, entonces va a ser de vital importancia, aunque el niño sea grande, pequeño que siempre lo supervisen, que se dé un tiempo y un horario para comprobar que su hijo está atendiendo la clase. Ahora es tan fácil no ver lo que están haciendo y pensar que están trabajando y en realidad están jugando en la computadora.

Entonces este tipo de actitudes primero van a tener que ser mediadas por el padre de familia con ciertas recomendaciones, por ejemplo, capacitarse en el uso de la plataforma, hablar con los docentes sobre la expectativa que tiene de la educación virtual, estar en contacto directo con los docentes mediante correo electrónico para informarle sobre el rendimiento de los chicos. Estas cosas nos van a generar una alianza estratégica entre la escuela, el niño y el padre de familia, lo que le permite avanzar en la educación virtual.

Este año, hay un estudio que dice que el 69% de los padres de familia, según Quality Media, no quieren volver a la educación presencial ni semipresencial, que desean tener a sus hijos en casa este año de educación virtual, entonces todos los centros educativos tienen que prepararse para ese concepto y entender también que eso va a llevar de la mano asumir retos en el hogar para la protección, el cuidado en redes sociales, el cuidado de lo que ven sus chicos en internet y, sobre todo, para llevar una adecuada educación.

¿Cuáles son los pro de la neuropsicología orientada a la neuroeducación?

Tenemos muchos pros, entre ellos el hecho de que el cerebro humano funciona como un ecosistema, es decir como una maquinita y si nosotros la cambiamos y la llevamos a otro entorno, vamos a desarrollar nuevas proezas, nuevas formas de adaptación. También vamos a mejorar nuestras competencias digitales porque estamos aprendiendo desde la digitalización de contenidos, estamos haciendo un avance al primer mundo.

También estamos aprendiendo de los valores de la cultura a la que nosotros pertenecemos y estamos basándonos en la adaptación del cerebro a las necesidades de su entorno. Estamos demostrando con la neuroeducación la capacidad de adaptación que tiene el ser humano y cómo este evoluciona y construye lecciones profesionales, estilos de vida, tecnología, recurso humano. Hay que entender que en todo sentido somos neurodiversos, es decir estamos creando una nueva fuente de aprendizaje rápidamente para una construcción positiva.

Si nosotros entendiéramos la adaptación estaríamos pensando que esta etapa neuroeducativa nos ayuda a evolucionar y que la emoción y la motivación, en el aprendizaje, van a ser fundamentales para el desarrollo del conocimiento.

¿Qué se podría hacer a nivel de hogar para incentivar al niño y que las clases no sean una rutina?

Lo primero es que vamos a jugar con los chicos, contarles situaciones de éxito, de triunfo, resaltando sus logros por pequeños; hacer tareas que relacionen a sus estimulos simbólicos o no simbólicos, por ejemplo, si faltan cinco días para comenzar clases, preparar su espacio de trabajo, vamos a hacer una rutina para ir acostumbrándolos.

Vamos a utilizar videos y canciones, sellitos de goma, tabla de estímulos para hacerlos sentir emocionados; permitir el apoyo del padre, de la madre, hacer que este no sea un proceso solo del niño. Ayudarlo por ejemplo en la meta de cognición, comenzar a hacer pequeños ejercicios de escritura, para que ya se encuentre preparado, no dejarlo solo en el proceso de aprendizaje, no hacerlo sentir que ese es un mundo para él y nosotros no vamos a ingresar, sino más bien favorecer esa conexión señalando lo orgullosos que se sienten de que en una nueva forma de aprendizaje, él esté logrando conseguir su meta.

Lo que va a faltar es el dominio social, entonces es importante que el padre y la madre de familia tengan un buen contacto en la mesa al momento de cenar, conversar; desarrollar el lenguaje que es lo que se va a ver mucho más afectado por la falta de condiciones sociales. (I)

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