La música, las risas, el llanto, las palabras, los sonidos cotidianos de la vida se fueron desvaneciendo para Martha. “En 2010 perdí mi audición y creí que jamás volvería a escuchar con claridad”, recordó. El tiempo pasaba y le dijeron que podían realizarle un implante coclear, que a nivel de un hospital privado bordeaba los $25 mil, solo la cirugía, sin contar con los implementos médicos, la atención y los honorarios profesionales. Ella se entristeció, pues no tenía el dinero suficiente para costear esa operación.

Esteban Serrano, líder del Servicio de Otorrinolaringología del hospital Eugenio Espejo, de Quito (HEE), explicó que con este implante quirúrgico subcutáneo los pacientes recuperan la audición en un 100%, pues se proporciona estimulación eléctrica directamente a las fibras nerviosas en la cóclea, reemplazando de este modo al nervio de la audición.

Luego de la intervención, los pacientes reciben rehabilitación auditiva durante un año. La ventaja en los pacientes poslinguales (personas que perdieron la audición, pero luego de tener percepción auditiva y de desarrollar el lenguaje) es que la terapia es rápida y altamente efectiva; en cambio, en los pacientes que nunca oyeron y, por lo tanto, no pudieron desarrollar estas habilidades la rehabilitación es larga y a veces tiene resultados menores.

Después de 2 años Martha recibió una gran noticia. En el hospital Eugenio Espejo, de Quito, le dijeron que esa cirugía podría ser una realidad, costeada por el Ministerio de Salud Pública.

Martha, al igual que otros pacientes que desean estos implantes, se sometió a una evaluación y diagnóstico multidisciplinario, con especialistas cirujanos, psicólogos, otorrinolaringólogos, para saber si era apta para la cirugía. Esto se realizó en la consulta externa del Servicio de Otorrinolaringología del hospital. Los resultados fueron alentadores y le agendaron fecha para operarla.

Desde 2012, el Ministerio de Salud Pública, a través del hospital Eugenio Espejo, inició la cobertura de este tipo de tratamientos; hasta la fecha se han realizado 10 implantes y se tiene programado llegar a 20 hasta finales de 2014.

“Me siento feliz con el implante; en el proceso de rehabilitación cada sonido fue como un nuevo descubrimiento; al principio había sonidos que no comprendía muy bien; en la calle escuchaba de todo, pero no me daba cuenta de nada, era como un zumbido y a veces hasta me mareaba, pero con el tiempo y con la terapia, todo mejoró”, contó Martha.

Este programa está destinado a jóvenes y adultos poslinguales a partir de los 14 años. Para los niños, este tipo de procedimientos se puede efectuar en el Hospital Pediátrico Baca Ortiz, de Quito, en donde desde 2008 se han realizado 150 implantes cocleares. La doctora Susana Rodríguez, otorrinolaringóloga, responsable de la colocación de implantes en este hospital, señaló que los niños que fueron sometidos a esta cirugía han desarrollado satisfactoriamente su lenguaje.

Este servicio también se ofrece en el hospital Francisco de Icaza Bustamante, de Guayaquil, y en el hospital Vicente Corral Moscoso, en Cuenca, donde se han colocado 10 implantes de este tipo, desde abril de 2014, cuando comenzó el programa en esta unidad, hasta junio de 2014. A estos 4 centros de salud son referidos pacientes de todo el territorio nacional.

Las cirugías de colocación de los implantes cocleares requiere aproximadamente un mes de preparación del paciente. Dura una hora y media, aproximadamente, en la que se instalan los aparatos con una garantía de dos años.

Serrano explicó que el sistema de implante coclear ayuda a restaurar el sentido de la audición en personas con pérdida auditiva neurosensorial de severa a profunda. Los beneficiarios de estos implantes son personas que han perdido la audición a niveles graves por alguna lesión o infección meníngea o aquellas que, debido a problemas congénitos, nacieron sin audición.

Para que los ciudadanos puedan beneficiarse del programa, deben acudir al centro de salud más cercano a su domicilio, para ser atendidos y evaluados. En caso de requerir una atención de especialidad son referidos a un hospital.