A última hora los integrantes de la Unión de Taxistas del Azuay desistieron de una marcha en contra de la Alcaldía de Cuenca y de la Empresa de Movilidad (EMOV).

Alrededor de 2.200 trabajadores del volante resolvieron realizar esta marcha ayer, que la denominaron pacífica. Sin embargo, por un acercamiento que hubo con el alcalde Marcelo Cabrera desistieron de la medida.

Ayer, los directivos de la Unión de Taxistas se reunieron con el alcalde para llegar a un acuerdo en los 7 puntos que  plantearon los transportistas públicos.

Una de las peticiones más solicitadas por parte de los taxistas es la que respecta al transporte informal. Según Bolívar Sucozhañay, presidente del gremio, “los informales se han tomado las calles de Cuenca, cuando el permiso es solo para trabajar en las parroquias rurales del cantón.

División al interior de los taxistas

Patricio Padilla, presidente del Frente Unido de Taxistas, otro sector de los transportistas, dijo que no está de acuerdo con la movilización que estaba prevista para ayer por sus compañeros, “ya que siempre hemos trabajado en estos temas que pide la Unión de Taxistas, como son la seguridad, taxis eléctricos y revisión de tarifas”, indicó en Radio Tomebamba.

“Hemos pedido al señor Bolívar Sucozhañay desde el mes de febrero reunirnos para hacer una hoja de ruta y un pedido, pero no nos ha dado una respuesta”, manifestó.

En el punto del control a la informalidad reconoció que falta más trabajo de la Municipalidad para superar esta situación, “nosotros nos reunimos periódicamente con las autoridades, con el señor alcalde y con el gerente de la EMOV”, dijo.

Agregó que la marcha prevista para ayer tiene fondo de campaña política con el propósito de llegar como candidatos al Sindicato de Choferes, en este caso de Sucozhañay, elecciones que se efectuarán en octubre. (I)