Es como una ciudad dentro de otra. Sus accesos adoquinados son calles por las que transitan incesantemente decenas de camionetas y camiones. Así es la Empresa Pública Municipal Mercado Mayorista de Ambato (MMA).

Este centro de expendio está considerado el más grande del país. Según datos oficiales, alrededor de 2.000 comerciantes mueven 10.000 toneladas semanales de productos agrícolas que provienen de las tres regiones.

“Nuestro presupuesto anual es de $ 3’000.000 que provienen del cobro de arriendos y de peajes. Contamos desde 2016 con un sistema integral de vigilancia con 21 cámaras, 11 guardias y 4 personas que observan las pantallas. Con esto cubrimos las 14 hectáreas que ocupa el MMA”, explicó María Luisa Parra, administradora encargada.

El acceso a este mercado no es complicado, pues hay puertas de ingreso y salida hacia las avenidas Julio Jaramillo, Tres Carabelas y El Cóndor. El paso de vehículos, como camiones, camionetas, taxis y carros particulares es intenso y se complica los domingos, el día de mayor movimiento comercial.

Adentro se expenden frutas de temporada, tomate riñón, zanahoria, naranjilla, granos tiernos, abarrotes, papas. También ajo, cebolla importada, granos y gramíneas, tomate de árbol, fruta del valle, mora, fresa, ajo, cebolla, huevos, hortalizas, fruta de la Sierra y más.

Este año empezó con dos sobresaltos para los expendedores. Primero, por el sostenido descenso de las ventas; y segundo, por el retraso en el ingreso de las frutas de temporada de la Sierra por causa de la sequía que se mantuvo durante noviembre y parte de diciembre de 2016.

“Por suerte, esta semana empezaron a entrar a la venta ya las claudias, los abridores y capulíes. Esperamos que pronto lo hagan las manzanas y peras”, añadió Parra.

Los domingos, en promedio, entran unos 5.000 automotores para cargar y descargar. “La producción de la piña hawaiana es buena y la traemos de Santo Domingo. La docena vale $ 8 y tiende a subir”, explicó Claudia Mayorga, de la Asociación Rey de Reyes. Hay 21 naves o cubiertas que albergan a comerciantes organizados por productos.

“Nos preocupa que muchos compañeros se han ido por la falta de ventas”, dijo Gloria Flores, presidenta de la asociación de naranjilla, que agrupa a 40 socios. (I)