La capital, en emergencia por incendios
Hasta ayer se registraron 2.053 incendios forestales que afectaron 1.154 hectáreas de vegetación. Esa situación obligó al Municipio de Quito a declarar en estado de emergencia a la ciudad.
Mediante una rueda de prensa el alcalde Augusto Barrera oficializó la decisión tomada por el Conjunto de Operaciones Emergentes (COE). Explicó que el pronóstico para septiembre, según el Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi), es la escasez de lluvias, alta radiación solar y clima seco, lo que incrementaría el riesgo de más incendios.
La declaratoria implica incrementar el personal para sofocar los flagelos, así como también los recursos económicos para la compra de implementos.
Ever Arroyo, titular del Cuerpo de Bomberos de Quito (CBQ), indicó que el aumento de personal ayudará a aplacar las llamas con prontitud. La entidad cuenta con 280 casacas rojas para atender las alertas por incendios forestales, a los cuales se sumarán 100 policías, 50 bomberos de la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos, 150 cadetes de la Escuela de Policía y miembros de las Fuerzas Armadas, mientras dura la emergencia.
Según el comandante de la Policía Nacional del Distrito, Juan Carlos Rueda, tanto los gendarmes como los cadetes tendrán un curso de inducción rápido para que puedan asistir en los siniestros forestales. “El personal está capacitado para trabajar en situaciones de riesgo”, dijo y aclaró que si el CBQ necesita aún más personal, la Policía Nacional está dispuesta a ayudar con más contingente.
En referencia a los recursos económicos que se dispondrán para la compra de implementos, el Alcalde explicó que se comprará solamente lo necesario, aunque no especificó el monto. “Somos una administración organizada y estamos preparados económicamente para estos casos”, dijo.
Aún así se utilizarán los tanqueros de todas las instituciones privadas y dado la gravedad del caso se pedirá ayuda a las empresas privadas que cuenten con una motobomba, que se pongan a disposición de los casacas rojas. Se incrementarán las brigadas forestales con el objetivo de registrar un incendio y detenerlo a tiempo.
Los llamados de emergencia al 911, durante este verano fueron 2.075. La línea sigue disponible para pedir ayuda, pero se destinó la línea 2 505560, exclusiva para denunciar a las personas que inician un incendio forestal.
Al momento cuatro personas están siendo procesadas por iniciar los flagelos. La pena es de 3 a 6 años de cárcel. Pero si el siniestro deja como resultado a una persona muerta, puede llegar hasta los 25 años.
Al momento 21 bomberos han sido afectados en su salud, con quemaduras, daño a las vías respiratorias, caídas y otros efectos por el humo inhalado. Ellos fueron llevados a las casas asistenciales más cercanas. “No escatimamos esfuerzos para que nuestro personal sea bien atendido”, dijo el Comandante de los Bomberos.
Por otra parte, el Alcalde informó que el incendio suscitado el pasado lunes, en Puembo, está controlado, mientras que el iniciado en Lumbisí la tarde del jueves se extinguió a la 01:30 de ayer; pero una ráfaga de viento lo volvió a encender por la mañana del mismo día. Ante el siniestro sucedido en Tababela, explicó que no ha afectado los trabajos que se realizan en el aeropuerto.