Ecuador, 27 de Abril de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Comparte

En tres horas puede revivir la historia política de Ecuador

En el museo de cera Alberto Mena Caamaño se recrea una de las reuniones donde los patriotas debatían las ideas libertarias.
En el museo de cera Alberto Mena Caamaño se recrea una de las reuniones donde los patriotas debatían las ideas libertarias.
Foto: Álvaro Pérez / El Telégrafo
31 de octubre de 2019 - 00:00 - Redacción Política

En las calles de Quito está la historia política del país: la revolución de los Estancos en 1874; años después, el levantamiento de las Alcabalas y el gran proceso independentista.

Todos tuvieron como escenario el Centro Histórico y todavía es posible revivirlos a través de un recorrido por las casas de los próceres. Para conocerlas puede tomar el Trolebús, cuyo valor del pasaje es de $ 0,25 y ubicar la calle Guayaquil para empezar el recorrido.

Las edificaciones históricas pueden ser recorridas en menos de tres horas. En muchas existen placas en las cuales se informa a los turistas sobre qué personaje vivió o qué suceso ocurrió en ese lugar. Por ejemplo, en las calles Mejía y Venezuela se encuentra la casa de Juan de Dios Morales, quien fue asesinado el 2 de agosto de 1810. Aunque no todas tienen esa misma condición.

En la actualidad muchas de estas viviendas son oficinas del Municipio de Quito. Otras son privadas, como la casa de Eugenio Espejo, el primer periodista del país y uno de los gestores de la Independencia. El bien está ubicado en la calle Montúfar. En esta casa también existe una placa que narra extractos de la vida del prócer.

Unos metros más al norte de la calle Montúfar está la casa de María Ontaneda; la vivienda se encuentra sobre las calles Venezuela y Rocafuerte. Ontaneda fue amiga cercana de la familia de Juan Pío Montúfar y partícipe del movimiento libertario.

Actualmente la infraestructura arrienda varias habitaciones donde se ubican locales comerciales. Otras casas fueron abandonadas y son víctimas de la destrucción. Esto ocurre con la edificación del hogar de José Villalobos, ubicado en la calle Rocafuerte y Chimborazo.

El patriota Villalobos fue el encargado de colocar las banderas rojas con blanco, en octubre de 1794, en los atrios de las iglesias, como símbolo de protesta. La vivienda está abandonada, pero la fachada y el interior, aunque afectados, permanecen intactos.

El registro histórico y el levantamiento de información de cada una de estas edificaciones lo realizó el psiquiatra e historiador Fernando Jurado. Esta trabajo le tomó 40 años, que están resumidos en 12 publicaciones respecto a las calles y el centro de la ciudad.  

Según Jurado, fueron cuatro los sitios de encuentro donde se reunieron los patriotas para planificar los hechos que sacudieron el siglo XIX. Entre ellos se encuentran las casas de Juan Pío Montúfar, que estaba en la esquina de las calles Guayaquil y Espejo y la hacienda Chillo-Jijón, en Sangolquí.

La casa de Manuel Ascázubi, que se ubica en la intersección de las calles Flores y Junín, y el domicilio de Juan Pablo Arenas, que queda en la esquina de la Montúfar y Espejo.

historia políticaEn las calles Guayaquil y Flores vivió el patriota Manuel Quiroga, quien fue parte de la Junta de Gobierno y participó en los procesos libertarios. Foto: Álvaro Pérez / El Telégrafo

Las tertulias literarias

Para el historidor y docente de la Universidad San Francisco de Quito, Carlos Freire, las tertulias fueron la fuente del debate político de la época.

Se conoce que Eugenio Espejo mantenía reuniones con jóvenes, conversaba sobre la crisis en la colonia, los problemas y sus posibles soluciones. Entre ellas se planteaba la autonomía, mayor justicia, distribución de cargos administrativos, etc. Para el historiador las tertulias fueron una preparación para el proceso independendista, pues los patriotas del 10 de agosto de 1809 fueron discípulos de Espejo.

Para evidenciar sus palabras, Freire recuerda una publicación que decía: “Autoridades españolas, de 1813, decían (con respecto a los próceres): herederos de las ideas de un antiguo vecino llamado Espejo fallecido años antes”.

Pero las tertulias no fueron los únicos espacios para debatir y planificar el levantamiento independentista -aseguró Freire-. Lo fueron también las fiestas, como pasó en la casa de Manuela Cañizares, ubicada a un costado de la iglesia del Sagrario, y en la casa de Manuel Quiroga y demás.

historia políticaCalle García Moreno. En la parroquia del Sagrario vivió Manuela Cañizares. En sus casas se planeaba la estrategia independentista. Foto: Álvaro Pérez / El Telégrafo

Los temas que se trataban en estos espacios eran la situación política de Europa, la conformación de los Estados Unidos; las ideas de la Revolución Francesa y,  además, la influencia del pensamiento español sobre la soberanía del pueblo y la autoridad del rey. “La ciudad de Quito tenía fama de ser rebelde, desde la colonia y antes del 10 de Agosto, eso lo dicen las mismas autoridades españolas y documentos”.

El excronista de la ciudad, Alfonso Ortiz, coincide con esta idea; señala que el pensamiento libertario, la discusión de las formas de poder y cómo gobernar se dieron en el ambiente politizado de Quito, de esa época.

Ortiz explica que las tertulias eran las ocasiones para poder informarse, discutir y modelar el pensamiento. (I)

Para estar siempre al día con lo último en noticias, suscríbete a nuestro Canal de WhatsApp.

Contenido externo patrocinado

Ecuador TV

En vivo

Pública FM

Noticias relacionadas

en guayaquil, tanto los grupos opositores como los que respaldan al gobierno recorrieron las principales calles del centro. la oposición trató de llegar a la gobernación, pero un cerco policial resguardó el área

Social media