El año anterior Panamá ocupó el primer puesto en el Índice Anual Global de Retiro, International Living. Lograr que se radiquen los jubilados extranjeros en el país es una prioridad, por los ingreso de divisas.

Parte de su estrategia para lograr este objetivo fue crear la Visa de Pensionados que se otorga a los extranjeros de cualquier país, con capacidad de comprobar una pensión de por lo menos 1.000 dólares mensuales.

La Visa de Pensionados permite a los extranjeros obtener su residencia legal en Panamá, bajo la condición de que sean jubilados o pensionados. De acuerdo al Departamento de Inmigración de Panamá, no hay mínimo o máximo de edad requerida para calificar.

Otra opción para los extranjeros, además de la pensión de 1.000 dólares mensuales es la compra de bienes inmuebles a título personal, por una suma superior a 100.000 dólares, lo que reduce la renta mensual a 750.

La renta del jubilado debe ser probada suministrando documentación, tal como una carta de la institución o compañía que paga su ingreso de jubilación o pensión. Esta certificación debe ser notariada y autenticada por el Consulado panameño más cercano al aspirante.

Ser titular de la Visa de Pensionados otorga más de 20 beneficios en descuentos. Por ejemplo, 50% en todas las actividades de recreación y entretenimiento, al igual que en el transporte público; 25% en consumo individual de comida y servicios públicos, como agua potable; 15% en cuentas por servicios en hospitales y clínicas privadas, al igual que en los establecimientos de expendio de comidas rápidas, siempre y cuando sean franquicias nacionales e internacionales.

Existen en Panamá otras poblaciones, además de la capital, que son atractivas para los jubilados, como Boquete o Coronado, que han logrado la prosperidad de comunidades, gracias a los recursos inyectados por los extranjeros. Con 2.000 dólares mensuales, una pareja puede vivir cómodamente con todos los servicios y facilidades.

Panamá también ofrece condiciones de infraestructura bastante avanzadas respecto a otros países de América Latina, como su red de carreteras, internet, aeropuertos; así como un clima mundialmente conocido como un paraíso tropical. El objetivo es que cada vez lleguen más jubilados extranjeros. A eso le apuesta el Gobierno central.