Miguel Armijos Castillo tiene un “motor” que siempre lo impulsa cuando está en el agua compitiendo. Se trata del recuerdo de su primo, Sebastián, quien en 2017 falleció a los 18 años de edad en un accidente de tránsito en Cuenca (Azuay).

El recuerdo de su primo es su fortaleza y su motivación. Por eso, la noche del lunes pasado le dedicó la medalla de bronce que ganó en los 200 metros mariposa en el Complejo Acuático de Cochabamba (Bolivia), con un registro de 2’05”17.

Esta es su primera participación en unos Juegos Suramericanos y su primera medalla dentro de un torneo del Ciclo Olímpico.

El accidente de Sebastián ocurrió en mayo del año pasado, un día después de conmemorarse el Día de las Madres. Él regresaba a su casa conduciendo su auto cuando subió a un parterre, el carro se volcó y chocó con un muro. La muerte fue instantánea.

Miguel aprendió a nadar en una represa ubicada en Ricaurte, cerca de Cuenca. Tenía cinco años y siempre se sintió atraído por el agua.

Fue un tío suyo quien, al ver su destreza para flotar y bracear, le sugirió a su mamá que lo inscribiera en una escuela de natación, ya que tenía las condiciones para  competir.

Tenía ocho años de edad cuando empezó a nadar en la piscina  El Batán y comenzó a destacar entre los niños de esa edad. Incluso ganaba a chicos mayores, lo que llamó la atención de sus profesores.

A los 15 años intervino en su primera competencia de carácter suramericano, pero en aguas abiertas, incluso su primera medalla regional fue en esta modalidad. Pero ahora se ha enfocado en las pruebas de piscina.

Pero en su época de adolescente estuvo a punto de dejar la natación por la práctica del fútbol. Fue seleccionado del Liceo Americano Católico, pero su mamá fue quien lo convenció de que continuara nadando.

“Ella quería que destaque solo y no en un deporte colectivo (fútbol), así que le debo a ella haber seguido en la natación”, le contó a Diario EL TELÉGRAFO poco después de la premiación.

Por otra parte, en la misma prueba donde Armijos ganó la medalla de bronce, el brasileño K.aue Da Silva Carvalho se colgó el oro parando los cronómetros en 02’02”37, dejando el segundo puesto para el colombiano David Arias, con 02’03”37. (I)