Santos se compromete a facilitar las liberaciones tras el anuncio de las FARC
El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, se comprometió hoy a facilitar las liberaciones de secuestrados, "como un gesto de paz", luego de que la guerrilla FARC anunciara el martes su intención de dejar en libertad a los policías y militares cautivos, algunos desde hace más de diez años.
"Estoy dispuesto a acordar los términos para la liberación de los once secuestrados, la liberación unilateral, como un gesto de paz en la dirección correcta", afirmó Santos en Bogotá durante una ceremonia de ascensos de la Policía Nacional.
No obstante, avisó de que, mientras no se traduzca en realidad ese anuncio, su Gobierno seguirá "combatiendo y perseverando" con la fuerza militar.
"Si hay voluntad, se dialoga, porque eso es lo que quiere el pueblo colombiano y eso es lo sensato: acabar este conflicto de 47 años; pero necesitamos demostraciones fehacientes que nos puedan convencer", agregó.
El mandatario se expresó así un día después de que las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) hicieran este anuncio, tras haber asesinado el pasado 26 de noviembre a cuatro rehenes en medio de un operativo militar en la zona donde los tenían cautivos.
Ese día fueron ejecutados con tiros de gracia los policías Édgar Yesid Duarte, Elkin Hernández y Álvaro Moreno; y el sargento del Ejército José Libio Martínez.
Martínez llevaba 14 años secuestrado y se había convertido en el cautivo por grupos armados ilegales más antiguo de Colombia e incluso del mundo.
En su mensaje difundido por internet, las FARC adelantaron que "la lucha por el canje de prisioneros y por la paz de Colombia, no se detiene" y que seguirán "explorando todas las vías que puedan conducir a la liberación unilateral de los prisioneros de guerra".
La misiva iba dirigida a las Mujeres Gestoras del Mundo por la Paz, un grupo liderado por la exsenadora colombiana Piedad Córdoba e integrado, entre otras, por la Nobel de la Paz Rigoberta Menchú, la esposa del expresidente de Honduras Manuel Zelaya, Xiomara Castro, la mexicana Margarita Zapata y la exdiputada argentina Marcela Bordenave.
Estas mujeres, que buscan una salida negociada al conflicto armado colombiano, habían solicitado a la guerrilla un gesto de paz.
Hoy, desde la Comisión de Paz de la Cámara de Representantes, su portavoz, Iván Cepeda, hizo un llamado tanto a la guerrilla como al Gobierno para que diseñen y ejecuten los operativos lo antes posible.
"El tiempo apremia y las familias esperan a sus seres queridos. Si hay disposición de las FARC para llevar a cabo la liberación unilateral, debe hacerse lo que esté al alcance de todos para que esto se dé cuanto antes", manifestó Cepeda.
Asimismo, recordó que las liberaciones "podrían constituirse en un hecho contundente para propiciar un diálogo de paz", al solicitar que esas operaciones se desarrollen "sin tropiezos de ninguna clase y garantizando la seguridad de quienes intervengan en ellas".
En tanto, en una rueda de prensa, el representante en Colombia de la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Christian Salazar, reiteró su llamado a una solución pacífica al conflicto "por todas las vías que se pueda y en donde las dos partes del conflicto se sientan cómodas y quieran avanzar".
También dejó claro que lo "positivo" es que el presidente de Colombia "mantiene una línea a seguir siendo abierto al diálogo".
Precisamente, el martes, poco después del anuncio de las FARC, Santos señaló que un hipotético diálogo sería "cara a cara, Gobierno y guerrilla", sin interlocutores internacionales.
"Y si hay posibilidades no veo difícil que haya un acuerdo relativamente pronto", agregó.
Con estas palabras Santos respondió, también con un "gesto", al anuncio de las FARC de liberar a los once policías y militares que tienen en su poder y que hasta ahora consideran "canjeables", es decir, que pretenden intercambiar por rebeldes presos. EFE