El Consejo de Seguridad de la ONU y el secretario general Ban Ki-moon condenaron fuertemente el ataque con bomba en la academia de policía de Yemen que dejó 37 muertos.

Los 15 miembros del Consejo dijeron que los autores del "horrible ataque con bomba" debían ser llevados ante la justicia y urgieron a todos los países a cooperar con las autoridades yemeníes para lograrlo.

El coche bomba explotó en la academia de policía cuando decenas de personas formaban fila para registrarse, matando al menos 37 personas e hiriendo a otras 66.

El ataque dejó en evidencia la creciente inestabilidad en Yemen, donde la situación empeora desde las revueltas populares de 2011 que terminaron sacando del poder al líder Alí Abdulá Saleh.

Ban condenó el ataque "en los términos más duros" y pidió a "todos los yemeníes trabajar juntos para combatir el terrorismo para llevar seguridad y la estabilidad a Yemen".