Ollanta Humala es investigado por excesivo gasto militar durante su mandato

Para Ollanta Humala y Nadine Heredia, los dolores de cabeza provenientes del poder no han terminado.

Casi dos meses después de que las funciones para las que Humala fue electo en 2011 terminaran, varias investigaciones se abren sobre él y su esposa, buscando explicaciones sobre varias de las decisiones tomadas desde el Ejecutivo.

Un mes antes de dejar la presidencia, Humala tuvo una visión: “después del 28 de Julio –día en que abandonaba el Palacio– el blanco seré yo”, dijo. El tiempo le ha dado la razón.

Una comisión especial del Congreso, junto con la Contraloría y el sector de Defensa, han puesto sus miradas sobre los gastos militares que se realizaron durante su mandato. La sorpresa es inmediata: en el gobierno de Humala se invirtieron 8.000 millones de soles ($ 2.385 millones) en equipo militar,  una cifra bastante alta si se la compara con los 537.000 millones ($160.116 millones) invertidos en ese mismo rubro por los tres gobiernos anteriores, es decir, entre 2001 y 2010.   

Fuerzas armadas, aéreas, marítimas y el departamento espacial del Ejército Peruano figuran como las ramas beneficiadas por estas compras que van, desde la adquisición de aeronaves y buques, hasta la posesión de un satélite francés por alrededor de 600 millones.

En política, esto es lo que se llama ‘la mesa servida’. El fujimorismo, con mayoría absoluta en el Congreso y un acérrimo crítico de la gestión de Humala, ha aprovechado la coyuntura para poner estas compras en la vitrina del debate nacional y agilitar investigaciones a su alrededor. Para esa tienda política, Humala no solo tiene que explicar por qué un gasto que han llamado ‘desmedido’ sino, además, el origen de esos materiales militares. Rusia, China, Israel, Alemania y España, figuran entre las naciones proveedoras, algo que para la oposición carece de lógica pues, contrario a lo que debería pasar en un país pequeño como este, el abanico de oferta militar se habría diversificado mucho, obligando a un gasto diferenciado cuando este pudo haber sido evitado.

Las voces del nacionalismo,  tienda política de Humala, ahora mismo tendrían que pararse en el techo del Westin, el edificio más alto del país, para ser escuchadas. Tras los comicios de abril pasado, a los que el nacionalismo llegó sin candidatos, la fuerza política que manejó las riendas del Perú en los últimos cinco años, no existe. Por eso, la defensa a las acciones de Humala ha sido tibia, casi nula. Han dicho, eso sí, algunos de sus exministros, que esas compras en lugar de proveer de armamento fueron orientadas a reemplazar material en mal estado, o elementos caducos cuya efectividad estaba comprometida. Eso, sin embargo, ha sido lo mismo que no decir nada, pues desde el Congreso ya se alista la fecha y los delgados a la comisión para citar a Humala y esperar por sus explicaciones.

Nadine Heredia, paralelamente, no ha tenido un destino diferente. Desde el mismo Congreso se ha propuesto que se cree una comisión especializada para investigar posibles casos de usurpación de funciones, alegando que, en más de una ocasión, ella ejerció tareas que solo le correspondía al presidente.

Heredia no se ha quedado callada y ha dicho –desde Twitter, eso sí– que los congresistas se amparan en su inmunidad parlamentaria para llevar adelante una venganza política.  

Para el destacado sociólogo Julio Cotler esta afirmación de Heredia carece de veracidad. Consultado por el Diario La República, Cotler fue enfático en señalar que para tener sobre los hombros una venganza política se debe representar, políticamente, una fuerza o tendencia, algo que el humalismo no hace en este momento. Él, a cambio, ve en este comportamiento del fujimorismo, el de perseguir a los Humala-Heredia, la única agenda política posible ante la carencia de un enemigo político de peso. Al no tener nada a lo que enfrentarse, pues son más los puentes que las diferencias con el gobierno de Kuczynski, deben buscar un enemigo.

La lógica de Cotler se confirma en las consecuencias que estas acusaciones tendrían, de llegarse a comprobar, sobre Humala y Heredia, apenas reprimendas políticas, y en el mayor de los casos, recomendación, desde el Congreso a la Fiscalía, para que se abra un expediente judicial por estos casos. (I)

Perú proyecta el 10% de pobreza para el 2021

Pedro Pablo Kuczynski, presidente de Perú,  tiene como meta reducir el nivel de la pobreza a 10%, con crecimiento económico del país para el 2021.

Durante una rueda de prensa en la instalación de la Mesa de Concertación y Lucha Contra la Pobreza 2016-2021, el mandatario señaló que para cumplir una de las grandes prioridades de su gestión es redistribuir mejor los recursos del Estado.

“El Perú ha progresado estadísticamente en reducir la pobreza, pero esta reducción se ha frenado en los últimos dos años y tenemos que retomar la senda de eliminar la pobreza”.

El mandatario informó que en esa línea será el sacerdote peruano Gastón Garatea quien liderará nuevamente la Mesa de Concertación y Lucha Contra  la Pobreza. No obstante, reiteró que existen proyectos que se encuentran estancados por procesos burocráticos. “Tenemos que destrabar y destapar. Saber quién tiene interés en parar las cosas”.

Horas más tarde, el Jefe de Estado, confirmó la presencia de Mark Zuckerberg, fundador de Facebook, como exponente en el Foro de Cooperación Económica Asia Pacífico (APEC), que se realizará del 14 al 20 de noviembre.

El anuncio del arribo de Mark Zuckerberg al Perú también fue confirmado por la Sociedad de Comercio Exterior del Perú (Comex), que destacó que el pionero tecnológico llegará con una importante agenda de trabajo que busca convertir a Perú, y a la región del APEC en general, en la zona más conectada del mundo”. (I)   

Datos

El vicepresidente de la Comisión de Fiscalización, Mauricio Mulder, dijo que no habrá un ‘circo político’ en la investigación a Nadine Heredia. “Todo se trata de una hipótesis”.

El 1 de septiembre, el Congreso le otorgó a la Comisión de Fiscalización facultades para investigar a Nadine Heredia por el caso de la supuesta usurpación de funciones al Presidente.

En 2014, el primer ministro, César Villanueva, renunció a su cargo acusando a la entonces primera dama de entrometerse en su trabajo.

El 21 de agosto, el ministro de Economía, Alfredo Thorne, comentó que en su ministerio Heredia puso personal de su confianza durante la gestión pasada.

Un día después aseveró que no tenía pruebas de lo que dijo. (I)