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El sector empresarial también expresó su satisfacción por los avances de las negociaciones

"Nos llegó la hora de vivir sin guerra"

El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos (izq.) le entregó al líder guerrillero “Timochenko” (der.) un bolígrafo elaborado con una bala de fusil.
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos (izq.) le entregó al líder guerrillero “Timochenko” (der.) un bolígrafo elaborado con una bala de fusil.
Foto: AFP
24 de junio de 2016 - 00:00 - Gustavo Veloza, corresonsal en Bogotá

Con campanas al vuelo, los colombianos celebraron en la Plaza de Bolívar, de Bogotá, la firma del acuerdo que pondrá fin a más de medio siglo de un conflicto armado. El pacto era sellado a 2.224 kilómetros de distancia, en La Habana, por el presidente Juan Manuel Santos y el jefe máximo de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Rodrigo Londoño Echeverri, alias “Timoleón Jiménez”.

La emblemática Plaza, adonde confluyen los principales eventos de los capitalinos, fue adornada desde temprano con flores blancas que simbolizaban la paz, pero al mismo tiempo con una corona mortuoria que significaba el entierro de la guerra. “Este es el día más feliz de mi vida, aparte de cuando nacieron mis dos hijos”, dijo Miriam Rodríguez, una oficinista que a esa hora participaba de las celebraciones.

En este mismo lugar, se colocó una banda violeta con la etiqueta que promocionó el jefe de las FARC, ‘Carlos Antonio Losada” y que dice “#AdiósALaGuerra”, justo al lado de la estatua del libertador Simón Bolívar. Lo acompañaba una placa gris en la que puede leerse ‘Q.E.P.D. la guerra en Colombia’ junto al periodo 1964 - 2016.

La etiqueta ha servido para que numerosos usuarios compartan a través de las redes sociales mensajes de esperanza y fotografías junto con las desde ya famosas placas. Esas mismas ofrendas florales, fueron ubicadas en las plazas de ciudades como Valledupar, Ibagué, Bucaramanga, Barranquilla, Pasto, Leticia y Cali.

La campaña llegó hasta el transporte público, pues el grupo también compartió la imagen de un bus perteneciente al sistema de transporte de Barranquilla, Transmetro, donde puede verse en su pantalla digital el mensaje “Sí a la paz”.

Entre las imágenes, que han sido compartidas por personajes de la vida pública como Ángela Robledo y Rodolfo Arango, también pudieron verse banderas de Colombia izadas en señal de respaldo al histórico acontecimiento.

En plazas y pueblos, pero también en las áreas urbanas, ciudadanos comunes expresaron su satisfacción por la resolución. “Yo hoy siento que tengo más oportunidades de generar más alimentos, ya no tenemos que esperar a que la guerrilla nos extorsione y nos quite lo que producimos, por eso vamos a vivir en paz”, sostuvo el campesino Rodrigo Mejía.

Por otro lado, las seis palabras usadas por el jefe guerrillero, ‘Carlos Antonio Losada, rápidamente se volvieron tendencia mundial en Twitter y fueron utilizadas por miles de personas para manifestar su apoyo o rechazo a los acuerdos a los que llegaron el gobierno del presidente Juan Manuel Santos y las FARC.

El guerrillero, recordado como uno de los más duros negociadores durante el fallido proceso de paz en el Caguán (1998-2002), acompañó su tuit con un video en el que señalaba: “El último día de la guerra significa el cese de la horrible noche de la violencia que hemos padecido durante tantas décadas, y el germinar de un nuevo día lleno de esperanzas, de ilusiones, de futuro, para las generaciones de colombianos que vendrán después y recordarán como algo que no debe repetirse nunca más en nuestra historia como nación”.

Asimismo, mucho se ha dicho de lo que ha vivido el departamento del Cauca, uno de los que más ha sufrido con la guerra. Por eso, el anuncio del cese del conflicto de manera bilateral y definitiva, es un aliciente para algunos mandatarios.

Ese es el caso del alcalde del municipio de El Tambo, Cauca, Celio Urresty, ante un anuncio de estos “es clave e importante para nuestro municipio porque es sinónimo de tranquilidad. Sin embargo, es necesario que se empiece a mirar a estos pueblos con inversiones que son, en última instancia, lo que en definitiva permite solucionar los conflictos”.

Este municipio, uno de los más grandes del departamento del Cauca, de todos modos aún concentra otros hechos que generan violencia. De hecho se denuncia la presencia de grupos neo-paramilitares y aún es fuerte la presencia de los del ELN.

En el caso del municipio de Toribio, dirigido por el alcalde Alcibiades Escue, explicó que el acuerdo confirmaría algo que desde hace año y medio aproximadamente ha venido sucediendo en esta localidad: “que ya no se oyen enfrentamientos entre la guerrilla y el Estado. Lo que brinda tranquilidad a la población local”. Toribio, otrora era considerado como uno de los municipios con más ataques realizados por las FARC. Desde el 2004 hasta el 2014, había recibido unos 600 atentados, por ejemplo.

Aunque hoy en Colombia existe un convencimiento real en la guerrilla –que completa 52 años de existencia– de que el proceso de paz va a culminar con éxito y de que los días de las FARC en el monte están contados, todavía existen ciertas reservas.

Por un lado están los seguidores del expresidente Álvaro Uribe y militantes del Centro Democrático, que no creen en este desarrollo y que van a votar “no” en el plebiscito por la paz y que solo refrendaría lo acordado en La Habana.

Una de las víctimas del conflicto, Alberto Vidal, dice que el mensaje de Losada es esperanzador. “Hemos vivido mucho tiempo en medio de la lucha armada y esto nos proporciona fe de que la situación puede mejorar, no solo porque nos dejen vivir tranquilos, sino porque pueden llegar cosas buenas en cuanto a salud y educación”, precisó Vidal, quien forzosamente tuvo que desplazarse debido a una violenta toma de las FARC en Caloto (Cauca), en donde trágicamente murió toda su familia.

En un comunicado, los empresarios colombianos reunidos en I Consejo Gremial Nacional, señalaron que “en representación del sector empresarial colombiano considera que el anuncio realizado por parte del Gobierno Nacional y las FARC es una gran noticia y reviste la mayor trascendencia para el avance y la culminación final del proceso de negociación entre las partes”. (I)

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La firma del Acuerdo es una victoria para toda América

"Timoleón Jiménez" afirma que el fin de la guerra se encuentra cerca

Tras más de 50 años de guerra, el gobierno colombiano y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) acordaron ayer el abandono de armas por parte de la guerrilla.

La ceremonia de acuerdo se realizó ayer en La Habana, Cuba, con la presencia del presidente Juan Manuel Santos y el comandante de las FARC, alias “Timoleón Jiménez”,  que se estrecharon las manos bajo el aplauso de los asistentes.

Mediante el Acuerdo de Cese del Fuego Bilateral y Definitivo, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) anunció que tomará las armas de las FARC para destinarlas a la construcción de 3 monumentos, acordados entre las partes.

Durante su discurso, “Timoleón Jiménez”, jefe máximo de las FARC, señaló que el gobierno colombiano y la guerrilla se encuentran cerca de la firma del acuerdo final para concluir con la guerra. Santos por su parte, destacó que “nos llegó la hora de vivir sin guerra.

El presidente de Cuba, Raúl  Castro, garante del diálogo, aclaró que el proceso de paz no tiene vuelta atrás. “Esta es la victoria de Colombia pero también de toda nuestra América, por lo que la paz en ese país es una esperanza para millones de personas en el planeta”.

El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, sostuvo que el acuerdo de alto al fuego es una clara muestra del gran compromiso de ambas partes para alcanzar la paz definitiva en ese país. (I)

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