Rio de Janeiro, la Cidade Maravilhosa enclavada entre los cerros, la selva y el mar celebra este domingo el 450 aniversario de su fundación con una enorme torta, espectáculos y nuevas obras de infraestructura.

Eterna musa de artistas que han loado su belleza y encantos, Rio recibió la soleada mañana del domingo el más clásico de los homenajes: una enorme torta de cumpleaños.

De 450 metros de largo, el pastel fue montado en la calle Carioca en pleno centro de la ciudad, alrededor de la que un millar de personas cantó el tradicional "Parabens".

Confeccionada con 2,5 toneladas de harina, 2,1 toneladas de azúcar, 1,5 toneladas de margarina, 3.000 huevos, 1.000 litros de leche y otro tanto de crema doble, la torta fue cortada por el alcalde de la ciudad Eduardo Paes, que ofreció la primera porción al gobernador, Luiz Fernando Pezão.

"Rio está pasando por muchas transformaciones. Estamos haciendo varias obras que van a generar mucho progreso para la ciudad, aunque sabemos que aún tenemos mucho que mejorar", comentó Pezão.

Rio está preparándose para acoger los Juegos Olímpicos-2016 después de haber sido una de las sedes de la Copa del Mundo-2014. La tarde del domingo, la presidenta Dilma Rousseff junto al alcalde inaugurarán el primer túnel subterráneo de la ciudad, de 1.480 metros, parte de las obras de remodelación de la zona portuaria de cara a las Olimpiadas.

Entre las actividades de este domingo el cardenal arzobispo de Rio, Orani Tempesta, presidió una misa por el aniversario de la ciudad en la Iglesia de los Capuchinos en el tradicional barrio de Tijuca.

En la calle Carioca, en todo caso, el ambiente era profano, animado al ritmo de la escuela de samba Estácio de Sá, nombre del militar portugués que fundó Rio en 1565.

Las celebraciones por el aniversario de la llamada Cidade Maravilhosa incluyen una maratón cultural de exposiciones, talleres y obras de teatro.

La noche del sábado, un show reunió en un parque carioca a grandes nombres de la música brasileña como Caetano Veloso, Paulinho da Viola, Gilberto Gil y Baby do Brasil que homenajearon Rio ante 40.000 espectadores.