Kuczynski aventaja a Fujimori por menos de 1 punto en las elecciones en Perú

Una victoria apretada. A las 16:00 del pasado domingo, cerrados los recintos de votación en Perú, los datos del conteo a “boca de urna” sorprendieron a más de uno: Pedro Pablo Kuczynski (PPK), segundo en el porcentaje de apoyo popular cinco días antes de la votación, aparecía como el virtual ganador, imponiéndose sobre Keiko Fujimori, primera en la intención de voto, desde enero de este año, al inicio de la campaña política.

Ipsos-Perú mostraba un margen estrecho de ganancia: un 50,4% para PPK frente al 49,6% de Fujimori. La encuestadora GFK, a su vez, sumaba un 51,2% para PPK sobre el 48,8% de Keiko. Solo la encuestadora CPI, cuyo director fue acusado de tener fuertes vínculos fujimoristas, daba como ganadora a la líder de Fuerza Popular con el 51,1%.  

Los simpatizantes de ambos candidatos, apostados en las inmediaciones de sus centros de campaña, recibieron con algarabía estos resultados. En la sede de Kuczynski la emoción presagiaba la victoria: se había logrado revertir, en cosa de días, la tendencia que estaba a punto de abrir la puerta para que regresara el fujimorismo al poder. En cambio, en la sede de Fujimori, y agarrándose a las cifras emitidas por la cuestionada CPI, unos afectados simpatizantes se encargaban de aparecer ante las cámaras con el optimismo de los ganadores. Detrás, un aire de desolación daba la medida de que para ellos, y cercana a las 18:00, literalmente, se venía la noche.

Ninguno de los candidatos dio declaraciones hasta cerca se las 21:00. No solo porque siendo los resultados a “boca de urna” tan estrechos, lo más prudente, de acuerdo con sus equipos de asesores, era nominar a este tiempo como el “empate técnico”, sino también porque, de lado y lado, desplegaron a sus personeros en cada mesa de sufragio para cuidar, con celo extremo, uno a uno los votos.

Kuczynski, animado por el transcurso de los minutos y la movilización de unas 1.000 personas fuera de su sede de campaña, ubicada en el distrito de Miraflores, fue el primero que habló.

“No hemos ganado nada todavía”, fue lo primero que dijo, con la voz sensiblemente afectada por los últimos días de campaña.

Pidió a los personeros estar atentos para evitar que les “roben los votos” y llamó a esperar pacientemente hasta que la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE) se manifestara oficialmente.

Minutos después, y al otro lado de la ciudad, en el distrito La Molina, Keiko Fujimori tomó el micrófono para compartir con sus simpatizantes un agradecimiento sentido. También los llamó a esperar con calma. Para ella, la jornada había derivado en un empate técnico, del que solo se podría salir a través de la información clara emitida por la ONPE.

Lima dio un giro

Mariano Cucho, jefe de la ONPE, dio los resultados oficiales. Hasta las 22:00 de ayer (hora ecuatoriana), con el 94,87% de las actas escrutadas, Kuczynski se ratificaba como ganador de esta contienda, con un 50,23% de los votos válidos emitidos a su favor, frente a Keiko Fujimori que habría obtenido el 49,77%.

A pesar de que, según Cucho, los resultados oficiales al 100% se tendrán el fin de semana, se sabe que la victoria de PPK viene legitimada porque ganó en el centro y sur, así como en la capital del país, Lima, donde en la primera vuelta, apenas en abril pasado, Keiko se impuso frente a los demás candidatos. Para Fujimori, a pesar de sumar respaldo en el norte y la selva del país, la victoria en estas regiones no fue abultada, lo que hizo que la diferencia con su contendor inmediato disminuyera al extremo.

Con el transcurso de los días saldrán a la luz las razones estructurales que llevaron a los peruanos a cambiar de opinión al final de la justa democrática. Pesa, sin embargo, la serie de denuncias  sobre el fujimorismo en el último tramo de la campaña que lo vincularon con vicios del pasado. El lavado de activos, la cercanía con el narcotráfico, la manipulación de la información, y hasta el retiro de un aparato celular de la celda del exasesor Vladimiro Montesinos, parece que recordaron a los electores un pasado al que no quieren volver.

Del lado de Kuczynski, en cambio, al parecer pesó mucho el respaldo multisectorial que tuvo en el último tramo de la campaña, sobre todo el llamado de Verónika Mendoza, líder de la izquierda, para cerrar filas ante el fujimorismo y votar por él.

“El recuerdo del autoritarismo pudo más que el temor al neoliberalismo y los peruanos prefirieron votar por la democracia. Aquí fue clave el voto de la izquierda, sobre todo en el sur, que antepuso los valores democráticos a las enormes diferencias que tienen con el PPK”, dijo a Clarín Carlos Novoa Shuña, analista internacional y profesor de la Universidad de Lima.

Fue clave, además, la ofensiva de los medios de comunicación y de la mayoría de la clase política que se encolumnó detrás de un hombre que, para ellos, representa la “democracia” contra el “narcoestado”, añadió Novoa.

Un ambiente de calma siguió a la jornada del domingo. Por delante, el virtual presidente, cuyo plan de gobierno hace especial énfasis en la inversión privada, la disminución de recaudación fiscal a cambio de la formalización del empleo, y una lucha cerrada contra la delincuencia basada en potencializar la policía, tiene como reto manejar atinadamente su relación con un congreso de mayoría fujimorista que, podría ser, el más grande escollo a la hora de iniciar las funciones en el poder.

Fueron habilitados 22’907.954 peruanos para que sufragaran el pasado 5 de junio en la segunda vuelta electoral para designar al jefe de Estado de Perú del período 2016-2021.

A pesar de que el voto es obligatorio en el país andino, la abstención va en el 18,19%. (I)

Misión de Unasur resalta proceso democrático

La Misión Electoral de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) llamó a la ciudadanía y a los candidatos de Perú a esperar los resultados en un ambiente cívico y democrático que caracterizó al proceso.

En un comunicado emitido después de que concluyeron los comicios presidenciales en segunda vuelta, la organización destacó la participación cívica y el normal desarrollo del proceso.

Además, precisó que no se alteró el orden público y resaltó la implementación de las recomendaciones realizadas a nivel logístico y organizativo en la primera vuelta, que se llevó a cabo el 10 de abril.

En el documento, la Unasur precisó que recibió los informes parciales de los delegados que recorrieron desde Lima Metropolitana, la Provincia Constitucional del Callao y en los departamentos de Loreto, La Libertad, Cusco, Cajamarca y Arequipa. “Como resultado se informa sobre la presencia de personeros de los partidos políticos; la existencia en todos los locales visitados del material electoral completo y en buenas condiciones; y los resultados de la capacitación a los miembros de mesa en los diversos sistemas electorales.

La Misión Electoral en Perú, que en primera y segunda vuelta fue integrada por 32 autoridades y técnicos electorales de 11 países y 14 entes electorales, estaba liderada por el senador colombiano Horacio Serpa, representante especial; y, por Juan Pablo Pozo Bahamonde, coordinador general y presidente de la Función Electoral en Ecuador. (I)