Bachelet potencia la televisión pública en Chile con inyección de $ 70 millones
Los canales de la televisión chilena suelen vivir ciclos de crisis. Y este año acumulan pérdidas feroces. Uno de los más afectados, tanto por el bajo rating como por sus ingresos, es Televisión Nacional de Chile (TVN), el canal público. El organismo estatal sufrió pérdidas por alrededor de $ 40 millones el año pasado, mientras que sus costos se elevaron por encima de los $ 100 millones en 2015. Por eso es que la semana pasada el Gobierno anunció un proyecto para sacar a TVN de la crisis y, además, se oficializó la creación de un canal estrictamente cultural.
En un anuncio que no dejó indiferentes a los chilenos y a la clase política, la administración de Michelle Bachelet inyectará nada menos que 70 millones de dólares para financiar la modernización de TVN, pensando en los nuevos requerimientos de la televisión digital. Pero también se destinarán otros 25 millones de dólares para un proyecto de un canal educativo y cultural que dependerá de la señal estatal. Este canal cultural no tendrá publicidad y usará las instalaciones de TVN para su funcionamiento, así como producciones externas.
La propia Bachelet ha reafirmado que TVN debe seguir existiendo con una misión pública, plural y siempre con la búsqueda de representar la realidad nacional. Se trata de la primera capitalización de la señal pública en 25 años. A pesar de su carácter estatal, TVN opera de una manera bastante peculiar.
En 1992, una ley estableció que el canal no puede obtener financiamiento, créditos, aportes ni garantías del Estado. Sin embargo, todos los gobiernos, desde el fin de la dictadura en 1990, han permitido que el canal retenga sus utilidades para su financiamiento. Con la excepción de lo que ocurrió en 2008 con la crisis financiera mundial y durante la gestión de Sebastián Piñera por el devastador terremoto de febrero de 2010.
La capitalización de TVN se había postergado por la desaceleración económica, pero su anuncio era algo largamente esperado. ¿Cómo se financiarán los recursos? Una de las opciones es una transferencia de capital con cargo al fisco, mientras que una segunda alternativa es emitir deuda por parte o el total de las sumas comprometidas por el Ejecutivo de Bachelet.
Son precisamente estas fórmulas las que despiertan cierta controversia, incluso dentro del oficialismo, porque algunos líderes de la Nueva Mayoría -la alianza de Bachelet- han manifestado que no fue muy oportuno el momento de la capitalización de TVN, dado el delicado escenario económico. Y especialmente después de que el mismo Gobierno dijera que no podría abrir la billetera para solucionar la crisis por la marea roja en la isla de Chiloé, en el sur del país.
En Chile existe una crítica transversal al rol que ha jugado TVN en estos años, especialmente por su programación, calificada por muchos como frívola y banal. El canal prácticamente funciona como cualquier otro de la televisión chilena, con reality shows, farándula, matinales y teleseries, sin material de gran contenido cultural ni muy diverso. De hecho, muchos documentales políticos premiados en el extranjero, así como filmes de un corte similar, no suelen ser transmitidos por TVN. Todo aquello ha generado que el ‘canal de todos’ pierda sintonía. (I)
Estudiantes se toman 9 planteles como protesta
Al menos 9 colegios de Santiago de Chile están tomados por los estudiantes en el marco de una protesta que coincide con el décimo aniversario de la llamada ‘Revolución de los pingüinos’, como se conoció a la rebelión de 2006 en demanda de la gratuidad de la educación y una mejor calidad de la enseñanza.
Entre los establecimientos ocupados por el alumnado figuran el emblemático Instituto Nacional y el Internado Barros Arana.
El presidente del Instituto Nacional, Roberto Zambrano, dijo que la movilización apunta a hacer notar que “el mercado debe salir de nuestra educación”.
La decisión de los centros de alumnos de estos establecimientos se da luego de que el miércoles, y por segundo día consecutivo, un grupo de estudiantes de la Coordinadora de Estudiantes Secundarios (Cones) vulneró la seguridad de un edificio público e ingresó al Ministerio de Educación para desplegar un lienzo gigante en el frente del edificio. El martes, estudiantes de la misma agrupación irrumpieron en el Palacio de La Moneda para advertirle a la presidenta Michelle Bachelet que estas movilizaciones se radicalizarían.
Uno de los dirigentes estudiantiles, Gabriel Iturra, afirmó: “La manifestación busca decirle a la mandataria que fracasó un gobierno que quiso legislar a espaldas del movimiento social”.
El Gobierno, a través de su portavoz oficial, Marcelo Díaz, reiteró a los estudiantes su oferta de diálogo, al tiempo que ha reivindicado “el esfuerzo y el empeño” que el Ejecutivo ha dedicado a transformar el sistema educativo. (I)
