Hace unos días escuché una charla de Mario Cimoli, director de la División de Desarrollo Productivo de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), quien expuso ideas relevantes para el proceso de cambio de la matriz productiva que el Ecuador está emprendiendo.

Primero, la geoproducción global se está reconfigurando. Hay un cambio de paradigma respecto de la localización de la producción industrial. Existe un proceso de relocalización de esta nuevamente en los países de origen (reshoring), lo que demanda la necesidad de innovar y producir localmente. Antes se pensaba que se debía controlar la innovación y que no era importante dónde se producía, lo que provocó, por ejemplo, la deslocalización de las industrias estadounidenses fuera de su territorio. Ahora eso está cambiando y EE.UU. ha lanzado una nueva política industrial.

A inicios de año, el presidente estadounidese Barack Obama señaló que “los avances en la tecnología permitieron a los fabricantes hacer más con menos y la competencia mundial significó que un montón de buenos empleos en la manufactura se fueran al extranjero”. Anunció la creación de 2 nuevos institutos de innovación: el Instituto de Innovación Manufacturera de Metales Modernos y Livianos y el Instituto de Innovación de Diseño y Manufactura Digital. EE.UU. se dio cuenta de que localizar la producción industrial fuera de los centros de investigación y desarrollo afecta la capacidad de innovar. Ahora considera que es clave tener cerca la capacidad de innovación y de producción; que la innovación de productos y procesos debe estar atada al sector productivo local, y que el sistema de innovación debe responder a las necesidades productivas y militares.

Además, EE.UU. está construyendo la política industrial basado en la preocupación sobre su balanza comercial, pero también interesado en descubrir cómo generar una clase media productiva y con buenos ingresos, sobre todo luego de la crisis financiera mundial. Considera que la manufactura genera empleo industrial con altos salarios, lo cual es clave para apoyar a la clase media. Al respecto, Obama manifestó: “Si queremos atraer más buenos empleos manufactureros a Estados Unidos, tenemos que asegurarnos de que estamos en la vanguardia de las nuevas técnicas y tecnología de fabricación”.

La transformación productiva debe considerar que los ciclos tecnológicos son cada vez más cortos y que las nuevas tecnologías cambian todas las oportunidades industriales, por lo que las que antes eran industrias maduras pueden convertirse en altamente innovadoras mañana.

Por otro parte, los bienes manufacturados siguen dominando el comercio internacional y la manufactura sigue siendo el ámbito principal de la innovación (microprocesadores, biotecnología, nanotecnología). Además, algo importante para la discusión en el Ecuador es que los servicios más avanzados están asociados a las manufacturas, son subproducto de ellas, por lo que no existe una economía basada únicamente en los servicios.

Por último, Cimoli planteó que la región, incluido el Ecuador, tiene el desafío de aumentar la productividad para sostener la ampliación de la clase media de los últimos años favorecida por los altos precios de las materias primas. Para ello, la innovación y la manufactura son claves.