Desde la época de Mostro de amor, de  Teleamazonas que competía con Rosita, la taxista, de Ecuavisa, en 2009, no se veía una disputa por el rating a dos telenovelas nacionales.  

No obstante, enmarcarlos en un género es peligroso o comprometedor. ¿Los hijos de don Juan es realmente la sucesora de todas las virtudes y defectos de Mis secretarias?

Es un culebrón con actores como Víctor Aráuz. El elenco es variopinto, que incluye a una exjuez de reality, una cantante, algunas modelos y otros elementos más bien mediáticos antes que dramáticos. Pero ahí van ‘avanti’. Si no los sacan del aire es porque tienen público.

El denominado share prime time, que se inicia a las 19:00 y culmina a las 22:00, no admite benevolencias. Lo criticable de Los hijos... es  insistir en poner temas musicales viejos y populares para darle color y calor a las escenas de amor forzado. No luce bien, se los ve poco originales. Parecen pilotos televisivos de estudiantes de institutos. Llamativo sí es ver juntas a María Fernanda Ríos, actriz de producciones como Rosita, la taxista y El Combo Amarillo; y a Jasú. Atrae porque TC Mi Canal había promocionado las diferencias personales de ambas artistas. Y yo diría que, dentro del campo del mercadeo y promoción, lo hicieron bastante bien. Eso es la TV. Se dice que hoy por hoy ambas han limado asperezas. De eso también se trata. Destacan en esta serie algunos ítems: la edición y la iluminación de las diferentes escenografías, el apropiado vestuario, la ambientación -aunque exageren con  presencia de marcas-, las tomas en exteriores también muy profesionales. Es de anotar también como punto positivo el solo hecho de que TC no solo genere programas reality y de chismes, sino también drama y comedia. Lo cuestionable en Los hijos... seguirá siendo la abundancia de personas deseosas de trabajar en una telenovela, que no necesariamente son actores.

Tres familias de Ecuavisa les supera en calidad actoral a Los hijos de... y destacan además en sus protagonistas con una Marcela Ruete memorabLe y espectacular, la Lucille Ball ecuatoriana. Érika Vélez con credibilidad en un personaje complicado, y muy bien elaborado. Frank Bonilla intentando borrar la imagen de Diego Spotorno. El  novato Pepe Tola, mejor de lo que sus detractores anunciaron. Destacan nítidamente también el actor Martín Calle, que está creando tendencia con el personaje de Genaro. La primera actriz Miriam Murillo, ideal, aunque repetitiva con personajes anteriores del mismo canal; lo mismo podríamos decir de Andrés Garzón. Aunque quizás la idea sea esa. Debe ser también la misma idea impuesta a Christian Maquilón que se repite con las características de su personaje de Así pasa. Lo destacable de la serie-telenovela, además de una excelente puesta en escena y dirección general, son sus protagonistas y el libreto que enmarca tres historias bien desarrolladas independientemente y a la vez ligadas. En el instante en que las historias se mezclen y los 6 protagonistas copen juntos la pantalla podrá suceder cualquier cosa. O la iluminan memorablemente o decrece el interés logrado.

¿Quiénes están ganando la batalla del rating?, ¿Los hijos... o Tres familias? ¿Será que se lo contamos en una siguiente columna? (O)