Por Angello Barahona

No era la más linda ni la más alta, pero Larissa Párraga tuvo en el concurso Miss Mundo Ecuador 2013, y específicamente en la noche final, esas agallas, temple y arrebato escénico que en su momento ostentaron Mónica Chalá, Jéssica Bermúdez o la misma Lady Mina.

En el escenario se agigantan, sepultan a la Barbie favorita, y ni la Venus del Olimpo les quita la corona. Miss World en realidad, y más allá de que a algunos les dé rabieta, es la versión nacional del Concurso Miss Mundo, segundo en importancia en el planeta, solo superado en América, por ejemplo, por el Miss Universo. Estos últimos años la candidata que nos representaba era la que se ubicaba segundo en Miss Ecuador. A la dueña del concurso Miss Mundo no le hacía gracia ser segundona de nadie y le dio la franquicia a Julián Pico y la tendrá por diez décadas suponemos...

Para hablar de torneos de belleza, al igual que en deportes o política, hay que tener conocimiento de los temas y de la historia. Así como no cualquiera puede ser presentador de concursos de belleza, pues debe tener un temple y cultura general amplia. Una cosa es un reality, otra un evento que designa representantes nacionales a tal o cual franquicia universal. Conocimiento del tema y de la historia, que por más frívola historia misma es. La redactora de un suplemento, que se inserta en un rotativo, entrevista a Párraga Mis Mundo Ecuador, y oriunda de Santo Domingo de los Tsáchilas, y le dice suelta de huesos que la felicita porque es la primera vez que esa ciudad va a un Miss Mundo (...). Jéssica Angulo en el 2000, de esa misma ciudad, ya fue a ese concurso. Y un par de bellas antes o después también. ¿No se supone que estamos para guiar, para ilustrar, y para corregir cuando humanamente nos equivocamos? A no ser que sea de mala fe... obvio.

Sigamos con Larissa, que de paso es un mejor tema. Mucha agua ha corrido bajo el puente desde que esta menuda pero simpática mujer pelinegra, de ojos enormes (quienes la conocen dicen que es sincera, sencilla) renunció a ser candidata al Miss Ecuador, que ganó con mucha facilidad Constanza Báez (hace unos meses), y luego de una desaparecida se coloca como candidata de un concurso que, hay que decirlo y nos endosamos ese comentario, tenía como única favorita a la ambateña Daniela Guerrero, una rubia espigada con porte de princesa europea o Miss Venezolana de los ‘80. Pero la Barbie Guerrero quedó sepultada a un segundo puesto cuando lució insegura, tenue, como una nena de colegio en una kermesse de institución rival. La terminó cuando le toca responder las interrogantes del jurado. Ahí perdió redondito y sus fans nos llevamos la mano a la cabeza #plop.

Larissa ganó, aún ante la mirada y semblante algo extraño de la mítica Susana Rivadeneira, miembro del jurado. No hay nada que hacer, se le desea suerte y éxitos a Larissa. Y que a los comentarios desestabilizadores no les haga mucho caso. Daniela perdió y quizás todos nos perdimos una Reina de cuento de hadas.

Escenografía y puesta en escena maravillosa. Iluminación de primera. Jueces impecables. Los presentadores son otro tema. Añoramos a Rocío Cedeño y a Carlos Luis Morales.

Como dato adicional debemos acotar que TC fue el canal de los concursos de belleza por mucho tiempo. Y muchos recordamos las impecables producciones de Alfredo Adum Wated y Rafael Duani. En 1992 ya TC hizo un Miss Mundo Ecuador, donde resultó ganadora Swanny Bejarano. Coincidencialmente 21 años más tarde TC co - produce el mismo concurso.