Angello Barahona

3 años, de pronto y se dicen fácil, pero no se hacen así de fácil. Son un tiempo largo, si se habla de esfuerzo, de trabajo serio; y también son cortos, si se habla de proyección, de metas. PP El Verdadero ha llegado ya a esos 3 años, que en un ser humano equivale al caminar a pasos firmes, y que en prensa es sinónimo de etapa de prueba superada. Para el autor de estas líneas es una celebración especial, pues fui de los fundadores de este maravilloso periódico Diario PP El Verdadero, allá en ese viejo e histórico palacio de la calle Boyacá, así me gusta llamarlo por la historia que encierra y su belleza arquitectónica, que luego por esos avatares y periplos por el mundo debí dejar, pero que hace unos meses regresé pleno de ilusiones y ganas con el fin de quedarme en sus páginas y entre sus columnistas durante mucho tiempo. ¡Que viva el PP !... y que viva muchos años para seguir haciendo periodismo positivo.

*La historia no nos favorece en el concurso Miss Mundo, como tampoco nunca nos ha favorecido, ni cuando fuimos dueños de casa y del balón (hace 9 años) en el Miss Universo. Ambos concursos, los más importantes del mundo en lo que a belleza femenina se refiere. Porque aunque no son el ejemplo más democrático del planeta, ya que a una mujer no se la debe calificar por sus atributos físicos, lo cierto es que estas contiendas siguen gustando a la gente, cada vez en menor medida, por eso es que las grandes televisoras con sus bien pagados productores, que a veces son hasta genios, están moldeando la figura y convirtiendo los acartonados eventos de belleza en realitys emocionantes como el concurso Nuestra Belleza Latina de Univisión. Pero decíamos que las cifras no nos favorecen en estos certámenes.

Miss Mundo, por citar un ejemplo, lo cierto es que sí nos ha ido mucho mejor que en Miss Universo, desde la lejana década de los 70 cuando una inolvidable Sofía Monteverde quedó entre las semifinalistas, al igual que tiempo después la linda guayaquileña Giselle Cucalón se ubicó entre las finalistas en los 80, hasta hace 6 años, donde una esforzada belleza con conciencia social como Valeska Saab se ubicó también entre las semifinalistas. Y pare de contar… que no hay más. Oportunidades de destacar, no hay muchas, también es cierto que no toda la culpa la tienen las transnacionales de la belleza y sus países convenientes, también es cierto que en ocasiones hemos enviado a candidatas que no siempre tienen el perfil adecuado.

La reina de belleza actual no debe diferenciarse mucho de las top model, pero a diferencia de estas debe tener un carisma arrollador que hipnotice a fotógrafos y camarógrafos, quienes siempre enfocan no a los rostros perfectos, que lo son casi todos, sino a las más graciosas, sensuales, amables, cautivadoras… y eso es algo que también se estudia, se crea, se direcciona, se produce. Que debe ser altísima, no necesariamente, las reinas de belleza de origen latino no son precisamente enormes: Cecilia Bolocco apenas marcaba el 1,70 y algo enamoró al mundo con su bien plantada personalidad. Ni que decir de Alicia Machado, bajita, pero puesta en un escenario y se adueñaba del universo. La actual reina de belleza debe ser una mujer bien puesta, no una nena tímida con apariencia de princesa en el bosque olvidada. La actual Miss Universo, Olivia Culpo, es también una mujer no alta, pero con opiniones definidas, eso la llevó primero a ser Miss USA y luego quedarse con la máxima corona. Personalidad a borbotones es lo que buscan y esa característica no deben olvidar los organizadores de Miss Ecuador, tanto los de Gama como los de TC.

*Danilo Rosero se va para Miami para afinar detalles de lo que el dice será una sorpresa musical para finales del 2013. Esperamos que ‘La voz’ siga cautivando con su talento inolvidable e inevitable.