Narcos pretendían enviar cocaína con cocoa a Viena
A simple vista eran fundas metálicas de cocoa con diferentes saborizantes, como quinua, machica y banano.
Los 2.900 empaques, con adhesivos de colores verde, naranja, café y amarillo, estaban guardados en 120 cajas que serían enviados desde el aeropuerto José Joaquín de Olmedo, en Guayaquil, a Viena, en Austria. El vuelo tendría como escala Estados Unidos.
El pasado lunes, al mediodía, el ‘dulce’ cargamento pasó la revisión de rigor en la terminal aérea.
El guía del Centro de Adiestramiento Canino (CRAC), Daniel Cáceres, acercó a la can Laika para que olfateara los cartones y esta con el movimiento de su cuerpo alertó que había una sustancia diferente.
Carlos Alulema Miranda, director nacional de Antinarcóticos, informó -la mañana de ayer- que el polvo fue sometido a la prueba cromatógrafo en el laboratorio de Criminalística y Ciencias Forenses y se comprobó que se trataba de clorhidrato de cocaína.
El peso de la carga es de tonelada y media, sin embargo no toda es de droga.
Alulema explicó que el estupefaciente cuando llega a su destino es separado. “Así como mezclan la sustancia, luego es separada con un procedimiento químico. Regularmente el mismo químico que viaja para combinarla, viaja al otro lugar para extraerla”.
Adicionalmente detalló que los delincuentes se ingenian nuevas formas de camuflar los narcóticos para evitar los controles. Lo han hecho con melaza, con café, con tejidos, entre otros.
Para exportar el cargamento, los narcotraficantes crearon una empresa para la exportación de productos orgánicos artesanales.
En el control se verificó que no tenía registro sanitario por lo que entró en el perfil de riesgo”, indicó el oficial. Agregó que -hasta la tarde de ayer- no había personas detenidas, pero que se investiga quiénes están detrás de la creación de la compañía y del envío.
Edwin Noguera Acosta, jefe de la Unidad de Antinarcóticos de la Zona 8 (Guayaquil, Durán y Samborondón), detalló que estas compañías funcionan temporalmente por unos dos meses con documentación adquirida ilegalmente. “Pero tienen una estructura con financistas, transportistas, tecnólogos y, también, con especialistas químicos que hacen las mezclas”.
Noguera indicó que en la terminal de carga del aeropuerto de Guayaquil todos los paquetes pasan por un control porque no es tanta la cantidad como en los puertos marítimos.
En lo que va de 2018, la Dirección Nacional de Antinarcóticos solo en la Zona 8 de Policía (Guayaquil, Durán y Samborondón) ha confiscado tres toneladas de diferentes drogas. Dos de estas estaban destinadas al tráfico internacional y una al tráfico para consumo interno.
A nivel nacional, según información del Ministerio del Interior, desde el 1 de enero hasta el 12 de febrero de este año, la incautación de sustancias sujetas a fiscalización supera las nueve toneladas. De esa cantidad siete eran clorhidrato de cocaína.
En los controles, además, se decomisaron 4.808 litros de químicos líquidos y 7.738 kilos de sólidos. Los operativos dejaron 1.435 personas aprehendidas. (I)
Droga con café
Otro gran cargamento
Encontrar gran cantidad de droga en el aeropuerto de Guayaquil no es común. El último operativo en el que se decomisó media tonelada de droga en la terminal aérea fue en febrero de 2015. La sustancia estaba mezclada con café.
56 cajas de cartón contenían las 1.360 fundas. La empresa Afollatov S.A. apareció en la guía de envío.
Cocaína, la más enviada
La cocaína es la droga más enviada de Ecuador al exterior desde puertos, aeropuertos, lanchas, entre otros canales. (I)
