La pequeña Yolet hubiera tenido un poco más de 2 años. Sus padres, Carlos Guale y Tatiana Tenorio, se la imaginaron inquieta, dinámica, juguetona, simplemente una niña que place abrazarla y no soltarla.

José Manuel también tuviera la misma edad de Yolet. Él era el cuarto hijo de José Cedeño y Lucía Álvarez, quienes estaban emocionados con la idea de ser padres nuevamente. Pero la alegría de estas dos parejas duró poco, ya que ambos infantes fallecieron varias semanas después, debido a que se contagiaron con la bacteria serratia marcescens en el hospital del niño Francisco de Ycaza Bustamante, en enero de 2011.

Carlos Guale destaca que su hija, la última que falleció (en mayo de 2011), era muy activa. En Quito (fue trasladada al Hospital Metropolitano) la bautizaron como la “niña milagrosa”, ya que se recuperaba de situaciones que parecían críticas. “Es como si ella decidía cuando tenía el respirador o no. Imagínese, una niña de pocos meses que se quitaba el respirador por sí misma y que luego seguía respirando con normalidad es algo de no creer, pero mi hija lo hacía”, cuenta Guale, quien destaca que, luego de dos años de haber perdido a Yolet, empezará a planificar tener un nuevo hijo con su esposa Tatiana.

“Quedamos desmoralizados, fue un golpe duro. No es fácil superar una pérdida así, en especial sabiendo que las cosas se pudieron hacer de una forma diferente. Estuvimos en terapia para recuperarnos del golpe psicológico”, destaca.
Tatiana indica que junto con Carlos estaban entusiasmados por la que era su primera hija, luego de 4 años de matrimonio. “Teníamos todo comprado. El coche, la ropita. Nosotros estábamos preparados para tener a nuestra hija en casa. Estábamos totalmente ilusionados y nunca nos imaginamos lo que pasaría en el hospital”.

José Cedeño y Lucía Álvarez tienen 3 hijos y la llegada del cuarto era algo muy esperado, el pequeño no resistió la bacteria serratia marcescens y el resto es historia conocida.

“Nosotros vivimos en El Empalme y venir a Guayaquil cada vez que dicen que habrá una audiencia nos cuesta dinero y perdemos de trabajar. Es duro venir y que a fin de cuentas suspendan una audiencia una y otra vez. Ahora vamos a ver qué pasa con el caso”, expresa José, en relación a que la audiencia oral se suspendió en tres ocasiones.

La diligencia se realizó al cuarto intento, la semana anterior, y obedecía al recurso de apelación y de nulidad interpuesto por la defensa de los doctores Patricia Parrales, ex directora del hospital Francisco de Ycaza Bustamante, y el ex jefe de neonatología, Ricardo Alcívar.

En la audiencia fue negado el recurso de nulidad por parte de la Segunda Sala de lo Penal, pero se dio paso al recurso de apelación, cuya respuesta se podría dar en el transcurso de la semana que viene. En caso de ser negado este recurso, se dictará el auto de llamamiento a juicio contra los galenos.

La fiscal que lleva el caso es Margarita Neira, quien expresa que se ha dilatado mucho el proceso para saber si cabe o no el juicio en contra de Parrales y Alcívar.

“El 4 de enero se debía realizar la audiencia, pero los abogados del doctor Alcívar se excusaron. El 4 de febrero el abogado de la doctora Parrales se excusó por enfermedad. Como nueva fecha pusieron el 8 de marzo, pero tampoco se instaló la audiencia. Recién hace pocos días se efectuó”, relata Neira.

La fiscal explica que “si en la audiencia declaran insubsistente el llamamiento a juicio, ellos (Parrales y Alcívar) saldrán sobreseídos. Pero si la Sala considera que no existe mérito y que el llamamiento a juicio es legal, pasa al tribunal”.
Para Hover Reyes, abogado de los progenitores (solo 4 de 11 familias intervienen en el juicio), asevera que los recursos presentados por los doctores no están fundamentados.