Un lote de 10.271 armas de fuego y 15.689 accesorios incautados fueron incinerados este jueves en Machachi.

Este proceso se llevó a cabo en las instalaciones de Adelca. El arsenal fue incautado y decomisado en diversos operativos realizados a escala entre 2014 y 2016.

Felipe Vega, viceministro de Defensa, presidió el acto de fundición de armas. Luego de la suscripción respectiva, reiteró que existe "la necesidad de reducir la violencia armada al interior de los estados ha promovido acciones concretas en el país".

En su discurso, el funcionario felicitó al personal, tanto de las Fuerzas Armadas como de la Policía Nacional, por los operativos ejecutados en ese lapso. Recordó que las entidades de la fuerza pública son los encargados de portar armamento y reiteró que estas entidades procuran la seguridad del país.

De acuerdo a información proporcionada por el Ministerio de Defensa, el armamento permaneció por más de 2 meses en las bodegas de armas del depósito "El Corazón", en el cantón Mejía de la provincia de Pichincha.

La incineración se realiza en cumplimiento al artículo 4 literal G del Reglamento a la Ley de Fabricación, Importación, Exportación, Comercialización y Tenencia de Armas, Municiones, Explosivos y Accesorios, que autoriza la destrucción de este material luego de permanecer en las bodegas del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas por más de 60 días desde su incautación.

Del total de armamento incautado, la mayoría correspondió a revólveres (6.250) y pistolas (1.200). Además se incautaron 1.367 cartucheras, 1.027 escopetas, 150 carabinas, 140 subametralladoras, también rifles y armas no letales, entre otras. (I)