Ecuador, 29 de Abril de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Comparte

A sus 68 años de nacimiento, Lavoe está en todas partes

A sus 68 años de nacimiento, Lavoe está en todas partes
30 de septiembre de 2014 - 13:05

Estracto de un ensayo de Marcos Pérez Ramírez

Murió joven, enfermo, pobre y en desgracia. Su público, su gente, que otrora deliraba con su canto y su presencia, parecía sordo ante su sonoridad ajada por el devenir del tiempo, el sida y la tragedia de su drogadicción, que lo consumió el 29 de junio de 1993.

Aunque la muerte siempre lo acechó -su suegra y su hijo murieron en circunstancias macabras y un fuego casi termina con su vida-, Héctor Lavoe ni siquiera pudo expirar cuando quería aquella tarde del domingo 26 de junio de 1988, cuando abrumado por el drama de su vida convulsa se lanzó por la ventana del noveno piso del hotel Regency en el Condado.

El destino, cual coro despiadado, fue el interlocutor irónico que persiguió a El Cantante desde el momento en que decidió tomar las riendas de su vida y a contracorriente desobedeció los designios de su padre y empacó rumbo a Nueva York en pos de la fama a mediados de la década de 1960.

Hoy, a 68 años de su nacimiento, el mito llamado Héctor Lavoe crece sin coto alrededor del mundo. Biografías cinematográficas, libros y cientos de artículos, ensayos y reportajes, que dan cuenta de su lugar en la historia de la salsa, son testimonio y catalítico para la leyenda que hoy cosecha el dueño del saoco.

De igual forma, para los creadores del hip-hop latino y el reggaetón, así como para gran parte de su público, El Cantante es un icono cultural vivo -igual sucede con los salseros más afamados de la salsa clásica- que sirve de puente entre estas dos sonoridades de moda con la música favorita de la juventud de sus padres, la cual también estuvo presente durante su crianza.

¿Cómo y cuándo se forjó el mito llamado Héctor Lavoe? ¿Qué elementos lo conforman y alimentan? ¿Quiénes son y dónde están sus seguidores? ¿Cuáles son sus coordenadas? ¿Por qué perdura El Cantante?

Sobre el Rey de la Puntualidad hay miles de anécdotas y comentarios de sus seguidores que hablan de él como si fuera un miembro más de sus familias, al tiempo que las canciones que lo hicieron famoso hasta son utilizadas para granjear simpatías políticas.

Su presencia en la cotidianidad puertorriqueña, latinoamericana y neoyorquina es evidente: Lavoe reverbera con sus melodías en los barrios de San Juan, Cali, Ciudad de Panamá, Caracas y Nueva York; los artistas del grafiti lo plasman en paredes y camisetas, mientras los intérpretes del hip-hop y el reggaetón toman su fraseo como base para sus composiciones.

Mientras estuvo en la cúspide de su carrera, El Cantante era un prodigio capaz de cualquier hazaña: llegaba al escenario colgado de una cuerda; comenzaba a cantar tras bastidores imitando el estilo de Daniel Santos, para sorprender a su público cuando revelaba la verdadera identidad que correspondía a la voz escuchada; y hasta viajó junto a la Fania All Stars a África -la tierra abuela de la salsa- donde ofició su “rito” y cantó ante miles de sus seguidores, cual Aquiles en el poema épico Omeros, del santaluciano Dereck Walcott, regresando al continente africano para poner a prueba el significado de su nombre: Lavoe.

El Cantante viajó y cantó por gran parte de los países latinoamericanos, así como a ciudades de los Estados Unidos con grandes concentraciones de poblaciones hispanas. Su presencia dejó una semilla que hoy germina en un culto e idolatría alrededor de su figura.

Para el sociólogo Ángel G. Quintero Rivera, profesor y autor del libro laureado Salsa, sabor y control, una de las pistas que explican la propagación del mito Lavoe por América Latina y el Caribe es el carácter itinerante de la emigración de los ciudadanos de la región.

“Lavoe es la música de la emigración. Es una figura muy presente en Panamá, Ecuador, Colombia y Venezuela, es el emblema de aquellos que regresan o se fueron del Caribe, y ahí Héctor, como parte de la diáspora boricua que fue la primera en irse a EE.UU. en masa, llevaba la voz cantante”, apunta el profesor de sociología.

Hasta hoy, Lavoe está en todas partes y en ninguna, es de nadie y es de todos, rebasó los linderos del bien y el mal, los de la verdad y la mentira, así como las fronteras nacionales y regionales. Armarlo y desarmarlo es volver a escuchar el saoco del jibarito ponceño y prueba fehaciente de que aún vive.

Para estar siempre al día con lo último en noticias, suscríbete a nuestro Canal de WhatsApp.

Contenido externo patrocinado

Ecuador TV

En vivo

Pública FM

Noticias relacionadas

El músico inglés confió en Philip Norman, autor que escribió el polémico libro titulado Shout! sobre Los Beatles. La edición en español de la historia de la vida de McCartney fue publicada por la editorial Malpaso en Madrid, España.

Social media