Empresarios y representantes de los sectores productivos del país analizan las salvaguardias aplicadas desde hace 2 semanas al 32% de los bienes importados en el país, y si bien coinciden en que la decisión es coyuntural debido a los bajos precios del petróleo y los ajustes en la balanza comercial del país, también reiteran que deberían ser temporales y someterse a revisiones.

Para Andrés Robalino, presidente de la Cámara de Industrias de Cuenca, las salvaguardias podrían ofrecer una solución temporal a los problemas de balanza comercial, pero consideró que para lograr un efecto permanente será necesario aplicar medidas a largo plazo que contribuyan a generar divisas, como el aumento de exportaciones e inversiones.

Robalino participó esta semana en una reunión con el viceministro de Comercio Exterior, Genaro Baldeón, para hacer tanto propuestas para impulsar el desarrollo económico del país, como observaciones a la medida. Hasta ahora el Ministerio ha asegurado que las salvaguardias serán analizadas cada 3 meses.

El titular de la cámara sugirió durante este encuentro una lista de insumos que actualmente tienen sobretasa y que podrían afectar a la industria en esa ciudad, considerada la más industrializada del país. Se refirió puntualmente a materias primas para la producción de embutidos, como grasas y cueros, y también insumos para la fabricación de llantas y pulpas de frutas. “Son productos que ya pagaban un arancel y que tienen cupos, y lógicamente eso limita el desarrollo de la industria”, apuntó Robalino.

Un criterio similar tiene Javier Díaz, principal de la Asociación de Industrias Textiles de Ecuador (AITE), quien opinó que el hecho de que se haya incluido ciertas materias primas  ya es motivo de incertidumbre. Aunque este gremio no ha tenido por ahora un acercamiento al gobierno, el hecho de que las medidas sean revisadas periódicamente es un anuncio importante.

Por ahora se ha enviado a Comercio Exterior un pedido de eliminación de varias partidas de insumos y maquinarias como máquinas de coser (en piezas para ensamblar y montadas), algunos tipos de pinturas y químicos, y etiquetas que no se fabrican localmente.

Las sobretasas, que son adicionales al arancel de los bienes gravados, van del 5% al 45%, y fueron colocadas con el objetivo de reducir  las importaciones y evitar que salga una mayor cantidad de divisas del país.

En cuanto a si la sobretasa ocasionará un incremento en las confecciones locales, Díaz señaló que “habrá que ver la decisión de los confeccionistas y dependerá del tipo de prenda”.

Si bien en Ecuador existen más de 150 fábricas dedicadas a la elaboración de telas e hilos, no todos los tipos se fabrican localmente.

La medida estará vigente durante los próximos 15 meses. Desde la Cámara de la Pequeña y Mediana Industria de Pichincha (Capeipi), los empresarios defendieron su trabajo y la capacidad que tienen para abastecer al mercado nacional.

Aseguran que el 95% del tejido empresarial está compuesto por pequeñas y medianas empresas que actualmente generan más de 700 mil plazas de empleo directo. Consideran que esa cifra se incrementará una vez que crezca la demanda nacional.

Rodolfo Purtschert, gerente general de la empresa láctea Floral, opina que las salvaguardias generan una situación de “dos caras”, pues si bien las medidas hechas son requeridas ante la coyuntura actual de Ecuador, la sobreprotección a la industria debe ser momentánea, pues a largo plazo no la hace más competitiva.

“Yo creo en un mercado más libre y en el que podamos tener también opciones de exportar porque al cerrar el comercio, los mercados también podrían cerrarnos las puertas a nosotros”, dijo. Señaló que la industria láctea en Ecuador siempre ha estado protegida, por lo que las salvaguardias no harán mayor diferencia. Floral produce al menos 8.000 toneladas de quesos al día.

Chocolate, café y textiles en tienda con sentido local

Con una inversión de $ 3 millones, el grupo costarricense Britt, conocido por promover el ‘sentido local’ en sus tiendas en aeropuertos de 14 países del mundo, inició sus operaciones en el aeropuerto José Joaquín de Olmedo de Guayaquil, en donde espera ventas por otros $ 3 millones en el transcurso de este año.

Vicente Moreno, gerente de la compañía en Ecuador, señaló que los principales productos que se promoverán en la tienda de Guayaquil serán el chocolate, el café, los textiles y artesanías. Por ahora contarán con 90 proveedores locales y para julio se espera que la imagen de la marca esté definitivamente instalada, con al menos 5 diferentes marcas de chocolate ecuatoriano, entre ellos el ganador de premios mundiales Paccari.

“La idea es que cuando sale alguien de Ecuador se lleve algo lindo del país, como una artesanía”, expresó Moreno, quien destacó que a través de esta inversión se generán fuentes de empleo, tanto directos como indirectos.