La información nutricional que contendrán las etiquetas de los alimentos y bebidas procesadas en el país se mantiene en debate. Por cuarta ocasión se aplazó la fecha de implementación de un detalle de los componentes en base a un semáforo que alerte al consumidor.  

Ayer en la tarde se mantuvo la última reunión entre autoridades del Ministerio de Salud Pública (MSP) y la Asociación Nacional de  Fabricantes de Alimentos y Bebidas (Anfab) para llegar a un acuerdo, en base a un porcentaje de la dieta diaria (2.200 calorías) y no a una porción de 100 gramos.

Para mañana está previsto que el MSP, Anfab y el Ministro de la Producción participen de una reunión para definir la colocación de etiquetas en los productos y en cuya cita participaría la Organización Panamericana de la Salud (OPS) con el fin de definir líneas para evitar la obesidad en el país. En tanto que los consumidores continúan sin comprender cuáles son los componentes de los alimentos y bebidas casi imperceptibles y con nombres extraños que se leen en las etiquetas.  

Un ejemplo es Carla Jaramillo, de 23 años, quien compró una bebida hidratante y una funda de papas sin marca. La primera pregunta sobre la bebida que salta es qué significa: Acidulante, ácido o cloruro y citrato de sodio. No lo sabe, casi nunca se fija en la etiqueta. De toda la información expuesta en la etiqueta (niveles de sodio, grasa y calorías) lo único que logra descifrar es: sabor natural a mandarina y colorante artificial, aunque desconoce a qué se refiere que el colorante sea el No.5 de la gama de colores artificiales.

Sobre la funda de papas sabe que en ocasiones son más baratas o vienen en mayor cantidad  que ‘las de marca’. El problema de desconocimiento, la falta de información en las etiquetas y en alguno casos la nula existencia de las mismas busca resolverse a través de la aplicación del Reglamento Sustitutivo para la Regulación y Control de la Publicidad y Promoción de Alimentos Procesados, por ello se pretende que la publicidad y la promoción de los alimentos procesados se ajusten a su verdadera naturaleza, que el consumidor esté informado de una manera fácil, rápida y comprensible, utilizando un sistema gráfico.

En términos nutricionales, el Reglamento espera que todo alimento procesado identifique el nivel de contenido de grasas totales, grasas saturadas, grasas trans, azúcares y sal, utilizando colores establecidos que son similares a un semáforo (alto: rojo, mediano: amarillo y bajo: verde); la identificación se realizará en las etiquetas del producto, su publicidad y su promoción

La descripción de la información será a través de los colores del semáforo (amarillo, rojo y verde) y se alertará en las etiquetas de los alimentos y bebidas; sin embargo, Christian Wahli, presidente de la Asociación Nacional de Fabricantes de Alimentos y Bebidas, dijo que  hay planteamientos que debe rectificar el MSP porque con la información en una etiqueta no se disminuye la obesidad, por lo que sugiere poner el porcentaje al cual equivale una porción dentro de la dieta diaria.