Menos tiempo en la preparación del terreno para los sembríos y ahorro en el costo de alquiler de maquinaria son los beneficios que los agricultores tienen al usar los 7 motocultores que les entregó el Ministerio de Agricultura, Ganadería, Acuacultura y Pesca (Magap), según Ángel Lalvay, presidente de la comuna San José de Morasloma, del cantón Nabón, en Azuay.

Lalvay es parte de los 40 productores de San José de Morasloma, que, en agosto pasado, recibieron los motocultores, como parte del Proyecto de Innovación Tecnológica y el Programa de Mecanización Agrícola, que ejecuta el Ministerio.

La iniciativa tiene como propósito entregar maquinaria a pequeños y medianos agricultores, para que tecnifiquen sus labores, como respuesta a la escasez de mano de obra que existe para trabajar en el campo, así como para fortalecer la producción rural y la agricultura familiar campesina.

Durante este año, el Proyecto de Mecanización Agrícola del Magap entregó 100 motocultores en la provincia del Azuay: Nabón (18), Girón (9), San Fernando (2), Sevilla de Oro (5), El Pan (2), Guachapalá (2), Paute (10), Gualaceo (2), Chordeleg (1), Sígsig (10), Pucará (15), Santa Isabel (9) y Cuenca (15).

Las beneficiarias de la iniciativa son organizaciones o asociaciones, directamente vinculadas con el área agrícola, ubicadas en el segmento de pequeños productores con bajos recursos económicos, previamente calificados y acreditados en el Magap.

Además, técnicos de esta cartera de Estado acompañan de manera permanente a los agricultores para que den un adecuado uso a la maquinaria, dijo Emma Mora Andrade, directora provincial del Magap.

Mora explicó que los beneficiarios de los motocultores cubren la puesta a punto, revisión y mantenimiento de la maquinaria, mientras que los costos del equipo los asume el Ministerio.

Agregó que la subvención propuesta se aplica en función de las condiciones de pobreza y marginalidad existentes. También capitaliza a las organizaciones de productores, lo que consigue beneficios directos para ellos, sus familias y las comunidades.

La directora provincial destacó que este aporte permite al agricultor optimizar su tiempo y tecnificar sus prácticas ancestrales, además de ayudar a mejorar la calidad de los suelos, y contribuir para que los ingresos de los agroproductores sean mayores. “La mecanización agrícola fortalecerá la agricultura familiar campesina, y permitirá la diversificación de la producción, articulada a la economía popular y solidaria”, resaltó Mora.

El motocultor es un equipo agrícola de marca YTO, con potencia de 16 caballos de fuerza y motor a diésel, con encendido mecánico que facilita su operatividad. Pueden utilizarse durante 7 u 8 horas diarias, y tienen una capacidad para trabajar entre 2 y 3 hectáreas por jornada.

Estos equipos pueden ser dotados de diversos tipos de implementos, para desarrollar actividades como sembrar, rastrar, compactar el suelo, regar y remolcar; además, son adecuados para campos lodosos o secos y en terrenos con pendientes moderadas.

Para ser beneficiarios de los motocultores, los miembros de la comuna San José de Morasloma, se acreditaron en el Magap con el fin de acceder a los diversos programas y proyectos del Ministerio de Agricultura, entre ellos el Proyecto de Innovación Tecnológica.

Innovación

Luego de trabajar por más de 2 meses con los motocultores entregados, los beneficiarios de la comuna San José de Morasloma, vieron que podían utilizar esta maquinaria para apoyar otras actividades de su labor agrícola.

Cuando decidieron colocar diversos acoples para sacar todo el provecho posible a esta maquinaria, contactaron a Cristian Morocho, un joven de 29 años que pertenece a la comuna y se dedica a la mecánica desde los 13.

Cristian trabajó en Guayaquil por varios años, donde perfeccionó sus habilidades modificando y fabricando maquinaria de uso agrícola.

Luego de revisar la maquinaria, Cristian colocó acoples en los 7 motocultores recibidos, y con recursos de la comuna instaló un remolque de carga, que ahora se utiliza para transportar abonos y otros insumos agrícolas, y aradoras para preparar el terreno. De esa forma reemplazaron la labor de la yunta (bueyes usados para labrar el campo).

Cristian dijo que le han contactado de comunidades cercanas que han visto sus innovaciones y quieren que trabaje en sus máquinas. “He realizado los acoples para los motocultores, pensando en darles un mejor uso” expresó Cristian, quien adicionalmente fabricó una trilladora de grano que utiliza la comuna para la obtención del grano limpio, sin panoja.

Apoyo en siembra de quinua

Con el uso de los motocultores, unos 20 socios de la comuna prepararon el terreno para sembrar 15 kilos de semilla de quinua, cantidad que cubre aproximadamente una hectárea.

Los habitantes de la comuna San José de Morasloma también son beneficiarios del Proyecto de Reactivación de Quinua, que el Magap realiza desde 2013, y a través del cual entrega kits de semilla de quinua, insumos agrícolas, da asistencia técnica permanente, y apoya en la comercialización.

Esto ha permitido que el rendimiento promedio sea de 30 quintales por hectárea, en lugar de los 20 quintales que obtenían anteriormente los agricultores. El producto conseguido se divide entre los 40 miembros de la organización.

Además de los beneficios nutricionales, la quinua, que es muy cotizada, ya que un saco de esta se vende en unos $ 100, tiene una alta aceptación entre los productores, quienes ven en los motocultores un gran apoyo para su labor.