Con el propósito de reivindicar la buena imagen de sus establecimientos, los rectores de los colegios Montúfar y Mejía, mediante acuerdo, instan a sus alumnos a confraternizar en sana rivalidad cuando sus selecciones se midan mañana (11:00)  en la final del Campeonato Intercolegial Sub 18 de Quito.   

Aunque la rivalidad de ambos planteles ha ocasionado enfrentamientos entre los estudiantes en varias ocasiones, la idea es mirar hacia adelante y cimentar un permanente ambiente de armonía, de sana competencia, donde prime  la paz, sea cual sea el resultado.    

Fanny Rodríguez, rectora del colegio Juan Pío Montúfar, señaló que los alumnos del colegio han asimilado bien el trabajo de las autoridades y profesores, por eso son actores principales de las estrategias que se aplicarán para propiciar durante el cotejo un ambiente de fiesta deportiva.    

Varias son las estrategias aplicadas con el fin de evitar confrontaciones antes, durante y después del juego. La institución solicitó al Sistema Integrado Trolebús unidades alimentadoras para llevar a 4.000 personas directamente desde el colegio hasta el estadio con el fin de evitar roces entre chicos de ambos colegios.       

A los miembros de las barras se les ha sugerido alentar al equipo con cánticos que no provoquen ni ofendan a los seguidores del conjunto adversario.

Medidas similares tomará el Instituto Nacional José Mejía Lequerica. Los integrantes de sus barras contrataron buses particulares para trasladarse hasta el estadio Atahualpa, escenario del compromiso. Se les pidió animar a sus compañeros sin insultar al Montúfar.

Según Jorge Andrade, rector del Mejía, estas disposiciones constan en la campaña “Mejía contra la violencia”, que desde hace 3 años impulsan las autoridades docentes y estudiantiles de la entidad.

En dicho emprendimiento se trabaja con la Sociedad de Egresados y la Policía Nacional, que han dictado talleres sobre deberes y derechos ciudadanos y  los riesgos de consumir drogas (incluido  licor), pues estas sustancias pueden estimular actitudes agresivas.

A esto se suma el trabajo de Evelyn Núñez, psicóloga del establecimiento, quien constantemente visita a los jugadores de las distintas selecciones del colegio. En esta ocasión, por tratarse de un partido de alta trascendencia, considerado un “clásico” en el medio educativo capitalino, Núñez ha intentado bajar la presión existente en los deportistas.

Para la final se invitó además a delegaciones de los colegios 24 de Mayo y Simón Bolívar; el primero llevará a su banda de paz, el otro a sus cheerleaders. Se estima que sumados los estudiantes de los dos colegios,  padres de familia, maestros, ex alumnos y delegados de planteles invitados, habrá unas 20.000 personas.  

Operativo

En el Ministerio del Deporte, representantes de esa cartera de Estado, la Federación Deportiva Estudiantil de Pichincha, la Policía Nacional y los rectores de los colegios finalistas brindaron ayer una rueda de prensa para dar a conocer detalles del operativo de seguridad que se implementará mañana.

Se anticipó que 505 policías estarán a cargo del control interno y externo del estadio Atahualpa. Los estudiantes no podrán entrar con mochilas al escenario deportivo.