Con un espectáculo de juegos pirotécnicos que iluminó la “Noche Azulgrana”, ayer el campeón ecuatoriano, Deportivo Quito, presentó ante su hinchada, en el estadio Atahualpa, la nueva indumentaria que lucirá en esta temporada.

Uno a uno los integrantes del cuadro de la Plaza del Teatro desfilaron por el gramado y cuando el cuerpo técnico también estuvo en el césped, las luces inundaron el cielo quiteño. Solo los reflectores del sector de la preferencia ayudaron a visualizar a los jugadores que fueron aplaudidos por la afición, mientras Liga de Quito calentaba.

En el duelo deportivo, la primera ocasión de gol la tuvo el capitán del dueño de casa, Fernando Saritama, con un cabezazo que apenas salió desviado. El rival enseguida respondió y tras un desentendimiento entre el zaguero Giovanny Espinoza y el golero Marcelo Espinoza apareció la habilidad del juvenil Diego Hurtado para la primera del encuentro a los 6 minutos.

Después pasaron varios instantes de descontrol para los actuales campeones, mientras en los graderíos los policías intentaban controlar a las dos hinchadas. Con refuerzos se logró evitar la violencia en las gradas y en la cancha apareció la igualdad tras una precisa definición de Fernando Saritama, a los 21’.

El compromiso se desarrolló en tres períodos de 30 minutos cada uno, dos de esos se jugó con titulares. Para el período restante ambos estrategas modificaron por completo sus equipos y con la lluvia que se presentó las emociones disminuyeron. No hubo mayor atracción para los aficionados que salieron tranquilos con el empate.