Un homenaje a Donoso actualiza su obra

A dos años de la muerte del escritor Miguel Donoso Pareja (Guayaquil 1931-2015), su obra continúa convocando, incomodando, provocando la risa y la duda. Como parte del aniversario de su muerte y con el propósito de poner en escena su pensamiento crítico Editorial Eskeletra editó un libro con dos ensayos, que a decir del ministro de Cultura y Patrimonio, Raúl Vallejo, “son fundamentales” para entender el panorama de la literatura local.

En el libro constan dos ensayos que Donoso publicó en la década del 80: Nuevo realismo ecuatoriano y Los grandes de la década del 30. El lanzamiento fue este martes 21 de marzo, en la Casa de la Cultura Núcleo del Guayas, con una introducción de Vallejo y con el diálogo de quienes fueron sus talleristas. Este evento fue parte de un homenaje al fallecido autor.

En Los grandes de la década del 30 Donoso analiza obras como Un matrimonio inconveniente, de Juan León Mera, hasta El lagarto en la mano, de Juan Andrade Heymann. Para Vallejo, el trabajo de Donoso es el que “hace un crítico literario en el sentido de ir construyendo un canon de la literatura”.  

Para el docente y crítico literario Raúl Serrano, este ensayo se presenta de forma orgánica y “se inserta desde la ruptura en la tradición de estudios fundamentales que han surgido en nuestro medio como La novela ecuatoriana de Ángel F. Rojas”.

Este trabajo fue editado en 1984 por El Conejo y reeditado por Eskeletra, en 2002, en Quito. La editorial Mar Abierto, de la Universidad Laica Eloy Alfaro de Manabí, publicó en 2014 este ensayo como parte del libro de ensayos Obras Completas  de Donoso.

En el Nuevo realismo ecuatoriano Donoso hace un análisis de la obra de autores que siguen engrosando la lista de la narrativa local, muchos de los cuales fueron sus talleristas. Para Arias, este trabajo se muestra “como un inventario, reflexión sabia y gozosa sobre el devenir, la evolución -¿involución?- de la novela ecuatoriana desde el vanguardista Pablo Palacio hasta Los guandos de Joaquín Gallegos Lara y Nela Martínez. (I)